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GENERAL: Pulsando el siguiente enlace, se llega a un índice general,
que contiene los más de ciento sesenta artículos que hasta ahora
hemos editado en "Tartessos y lo invisible en el arte".
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ESTE ARTÍCULO TIENE UNA SEGUNDA PARTE, TITULADA:COMENTARIO A LAS CRONOLOGÍAS, PARTE II: DESDE EL 2200 HASTA EL 1000 a.C.
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.
Los
capítulos se desarrollan en un texto escrito en negro y se acompañan
de imágenes con un amplio comentario explicativo (recogido
en rojo y cuya finalidad es razonar ideas).
Si desea leer el artículo entre líneas, bastará con seguir
la negrilla y las
letras rojas destacadas.
.
SOBRE
ESTAS LINEAS:
Mapa
mío que ya habíamos publicado, con los
yacimientos
varios milenios atrás de ámbar, oro, plata, cobre, estaño y
cinabrio (Asia
Menor, Oriente Medio, Europa y Norte de África).
En el mapa hemos marcado en lineas de navegación por cabotaje
(de cabo a cabo, sin perder tierra de vista); los
diferentes caminos que seguirían desde el neolítico y eneolítico,
para ir descubriendo minas y nuevas tierras. En Oriente, asimismo
hemos señalado la zona de Ugarit -junto a la antigua Ebla-;
como base unida a Mesopotamia entorno al quinto-cuarto milenio a.C. y
desde
la que realizarían expediciones al Oeste. Asimismo, se marca Biblos
como puerto de fundación egipcia
-a mediados del quinto milenio- del
que navegaban
hacia el Egeo o hasta el extremo Occidente (llegando a las costas más
remotas, en busca de metales para comercializarlos en el Nilo).
También
apuntamos Creta, como otra de las bases marítimas desde las que se
llevarían a cabo singladuras por el Mediterráneo en
tiempos muy tempranos -pues aquellos que se asientan en esta isla
tendrían capacidad para navegar centenares de millas, mar adentro-.
Finalmente, en
lineas verdes, hemos marcado las rutas “canoeras” que las
culturas megalitistas del Atlántico realizarían. Trasladándose de
modo nómada; durante los veranos hacia el Norte, para regresar en
invierno al Sur -de
forma común a este tipo de civilizaciones canoeras- (1)
. Portando así el ámbar del Atlántico (junto a pepitas de oro y
plata), hacia las zonas del Mediterráneo; donde las trocarían con
navegantes llegados del Oriente lejano -Biblos, zona de Ebla o del
área egeo cretense-.
.
ABAJO:
Mapa que ya habíamos publicado, con la
difusión de los metales y los yacimientos minerales, antes marcados.
Observemos cómo la metalurgia comienza hacia el 3800 a.C. en tierras
cercanas a la desembocadura del Danubio y en Anatolia
-promoviendo las primeras culturas danubianas y del Cáucaso-.
Alcanza ya por entonces tierras del Mediterráneo; llegando a
Chipre, las costas egeas de la actual Turquía y parte de Oriente
Medio. En una fase posterior (que arrancaría hacia el 3500 a.C. y
marcada en verde) la expansión de los metales -calcolítica- se
extiende por el resto de Asia Menor, Canáan y alcanza a Egipto,
cubriendo a la mitad de Grecia. Por su parte, en el área norte,
esa difusión del cobre desde el siglo XXV a.C. comprenderá toda
la zona del Danubio, hasta la mitad de su cauce, cubriendo desde el
Mar Negro al Adriático. Una tercera fase de divulgación
calcolítica, se iniciaría entorno al 3200 a.C. y se extenderá por
el resto de Europa mediterránea y eslava, incluyendo Italia e islas;
por el Norte de África, hasta la actual zona de Túnez. Ampliándose
su difusión por el resto de costas del Mar Negro y llegando
asimismo y de forma aislada, al Sur de la Península Ibérica.
Apareciendo el cobre-bronce en todo el área meridional de nuestras
tierras, de un modo que solo ha podido divulgarse a través de barco;
ya que no había llegado por entonces a Francia, ni a las costas de
Argelia o Marruecos.
.
Tal
como decimos, esa difusión del calcolítico aparecida en nuestras
costas entorno al 3200 a.C., “salta” procedente del área
italiana, o bien viniendo de la actual Túnez (sin tocar tierras
intermedias). Algo que nos obliga pensar que desde estos
últimos puntos de expansión hubieron de arribar -directamente y
por barco- expedicionarios orientales, llegando hasta la Península
Ibérica en busca de metales y ámbar (de manera parecida y como
lo habrían hecho ya en épocas de rutas del ámbar, durante el
neolítico). Finalmente, en el mapa y destacado en naranja,
podemos ver la difusión del calcolítico en su última fase (desde
el 2700 a.C.); cuando llega a casi todo el resto de Europa,
exceptuando el Norte, pero alcanzando las islas Británicas. Un
modo de expandirse que de nuevo nos habla claramente de una
divulgación llevada a cabo principalmente por mar y a mi juicio
procedente de las costas atlánticas peninsulares.
A-
INTRODUCCIÓN:
.
En
el artículo de hoy comentaremos el comienzo de los capítulos los
anteriores; en los habíamos desarrollado una cronología del Mundo
Antiguo: Desde los inicios de la Edad del Bronce, hasta el siglo I
a.C..
Estos
capítulos eran los siguientes:
-
(A) CRONOLOGÍAS DEL MUNDO ANTIGUO, EN REFERENCIA A LA PENÍNSULA
IBÉRICA. PARTE PRIMERA: ENEOLÍTICO Y EDAD DEL BRONCE: Donde
analizamos las diferentes etapas y sucesos del Mundo Antiguo durante
el Eneolítico y la Edad del Bronce (ligados a Egipto, el
Mediterráneo, Canaán, El Egeo, Anatolia, Oriente Medio y
Mesopotamia). Con el fin de comparar todo ello con los hechos
observados en la Península Ibérica durante un igual periodo. PARA
LLEGAR AL ARTÍCULO, PULSAR:
-
(B) CRONOLOGÍAS DEL MUNDO ANTIGUO, EN REFERENCIA A LA PENÍNSULA
IBÉRICA. PARTE SEGUNDA: BRONCE FINAL Y EDAD DEL HIERRO:
Donde analizamos las diferentes etapas y sucesos del Mundo Antiguo
durante el final de la Edad del Bronce y la del Hierro (ligados a
Egipto, el Mediterráneo, Canaán, El Egeo, Anatolia, Oriente Medio y
Mesopotamia). Con el fin de comparar todo ello con los hechos
observados en la Península Ibérica durante un igual periodo. PARA
LLEGAR AL ARTÍCULO, PULSAR:
.
Mis
cronologías (antes referidas) comprenden hechos de Oriente Medio,
Egipto, Anatolia, El Egeo, Creta y Chipre; así como los
acontecimientos sucedidos en Asia Menor y en diferentes culturas
antiguas del entorno. Recogiendo el desarrollo de aquellos sucesos,
conforme pudieran haber influido en la Península Ibérica;
contando con el impacto que -en mi opinión- tuvieron sobre nuestras
tierras ciertos hechos. Unos acontecimientos que gracias a la
arqueología y a la ciencia podemos conocer hoy. Acontecimientos de
áreas más o menos lejanas; durante una etapa en la que apenas
existen testimonios acerca de la Península. Hechos que influirían
-a mi parecer- en el devenir de la Prehistoria y Protohistoria de
nuestras tierras. Debidos a cataclismos, revoluciones, avances,
convulsiones, aparición de nuevas culturas y civilizaciones o
expansión de imperios; acaecidas en extremo Oriente, en Asia Menor,
el Egeo, Anatolia o en Egipto.
.
Transformaciones
y catástrofes, que aunque sucedieran en zonas muy lejanas, traerían
hasta nuestras costas innovaciones, progresos y nuevas gentes.
Primero, a consecuencia de la búsqueda de oro, ámbar y plata;
durante el quinto y cuarto milenio a.C.. Cuando canoeros y
pequeños navegantes viajaban desde Oriente Próximo hasta Dinamarca,
buscando esas pepitas de oro o piezas de resina. Aunque más tarde
hubieron de llegar en forma de exploraciones para alcanzar las minas
de cobre y estaño atlánticas -desde el Eneolítico, pero
especialmente durante El Bronce-. Unos metales imprescindibles por
entonces para subsistir y que eran muy escasos en el Mediterráneo.
Existiendo apenas algunos filones de cobre en Chipre, Eubea, Cerdeña
o Córcega; y tan solo yacimientos de casiterita en Cerdeña, aunque
de una calidad plúmbea -que generaría un bronce muy
quebradizo-. Todo lo contrario que el estaño peninsular; con
minas por entonces en Almería y Cartagena, de menor calidad. Pero
cuya la casiterita del Atlántico, era la de mejor entre todas
las conocidas. Un estaño que por entonces se hallaba con abundancia
en el rio Tartessos (el Guadalquivir y sus fuentes), o en las orillas
de desembocaduras fluviales de Portugal y Galicia. Siendo estos
los llamados “Estaños Blancos y Negros”, obtenidos en las
Cassitérides; de una pureza inigualable y que extraerían desde
los filones peninsulares atlánticos, tanto como más tarde buscaron
en los yacimientos de la Bretaña francesa y en las Islas Británicas
(2) .
.
Bastará
observar las imágenes que arriba hemos recogido, para comprender el
modo en que -necesariamente- los antiguos tuvieron que venir hasta
nuestras tierras, buscando metales. Al menos desde el descubrimiento
del Bronce (+/- desde el 3000 a.C.). Así,
viendo el primer mapa (con los yacimientos de Europa atlántica y
mediterránea, Asia Menor y Norte de África) y comparándolo con en
el segundo, que recoge la difusión de metales. Queda obvio que el
eneolítico y el calcolítico llegan al Sur peninsular hacia el 3200
a.C., por vía marítima; ya que aparece el uso del cobre en el
litoral hispano mucho antes de hacerlo en el francés o en el de las
costas marroquíes, argelinas y tunecinas. Todo lo que -a mi juicio-
se debió a la riqueza mineral que tenían por entonces nuestras
tierras; llegado a ser las más famosas en yacimientos preciosos.
Hechos que comprenderemos perfectamente leyendo a Schulten,
cuyas citas referidas a la riqueza metalúrgica ibérica se repiten
en sus obras. Tal como destaca en su precioso libro Hispania; en cuyo
el apartado XV- dedicado a los metales- nos dice:
.
“Como
ningún otro país, es y era España rica en metales. Sus yacimientos
se encuentran en las cordilleras marginales, particularmente en la
del S., y son fácilmente accesibles desde la costa cercana. También
el oro de los ríos procede de allí”
.
Para continuar escribiendo: “
Las
minas del S. y del SE. ya se explotaban
hacia 2000 años a. de J.C. Con ellas tiene que ver el comercio de
gentes orientales que ya existía en tiempo premicénico y que
atestigua la cultura del SE. Acerca de la plata en los poblados de la
Edad del bronce de SE., habla Siret en sus `Premiers
âges du métal dans le SE. de l Espagne´.
En gran escala explotaron los tesoros argentíferos del S. y SE. los
fenicios y los cartagineses. Plinio conoce los Putei Hannibalis,
junto a Cartagena. La riqueza de España en metales preciosos fue el
objetivo de la conquista romana. Las cantidades de oro y plata
tomadas por ellos a las tribus vencidas fueron enormes
”
(3) .
Por su parte, Schulten en su libro Tartessos, nos dirá al respecto:
“Andalucía
atesoraba en su seno esos metales, y ya
en el milenio tercero los exportaba lejos de sus costas. Es, pues,
lícito suponer que en el milenio tercero a. de J.C.,
el
Oriente sacaba de Andalucía la plata y, sobre todo, el estaño, y
que los cretenses o carios serán los agentes de este comercio”
(4)
.
.
Pero
no solo la riqueza mineral de nuestra Península llamaría la
atención de las primeras civilizaciones orientales, haciéndolas
venir hacia nuestras latitudes. Ya
que desde tiempos del ámbar, también
conocerían los yacimientos de metales preciosos situados en tierras
más al norte.
Nos referimos a las minas
de oro, plata, cobre o estaño de la Bretaña francesa y de las islas
Británicas. Todo lo que motivaría a esos expedicionarios venidos
del Oriente -Biblos, Eba o del Egeo- para regresar cada verano al
litoral peninsular. Quienes,
posiblemente incapaces de navegar el peligroso y extenso Atlántico;
seguramente trocarían esas mercancías en las proximidades de
Gibraltar. Quedando la labor de traer aquellas riquezas del Norte,
para los navegantes y pescadores de la costas atlánticas
peninsulares (asentados
en las playas gaditanas, portuguesas gallegas o cantábricas).
Un transporte que podrían realizar en simples canoas, cuando la
mercancía fue ámbar y pepitas de oro o plata. Pero que cambiaría
durante la Edad del Bronce; habida cuenta que entonces precisarían
portar toneladas de metal, para tocarlas con los mencionados
expedicionarios. Todo lo que obliga a pensar desde la aparición del
bronce, en una estructura minera
y de fabricación de lingotes en bruto. Junto a otra, también bien
organizada, que permitiese cargar el metal de puerto a puerto.
Llevándolos desde las Islas Británicas, Bretaña, el Cantábrico o
las costas de Galicia y Portugal; hasta el Estrecho de Gibraltar.
Un punto donde los navegantes orientales podrían arribar con
facilidad durante las épocas de bonanza; en las pequeñas chalupas
que durante el Primer Bronce manejaría cualquier pescador del Egeo y
de Oriente Medio.
.
Los
hechos que antes hemos referido, explican las siguientes palabras de
Schulten, escritas en su libro “Tartessos”: “En
Falmouth de
Cornualles se ha encontrado una barra de estaño (III) con la forma
característica de las barras de cobre cretenses, esto es, la doble
cola de golondrina (IV).
Este hecho podría ser indicio de un comercio entre Creta y
Tartessos, pues los tartesios traficaban con los oestrymnios (v. cap.
VIII), que navegaban a Inglaterra (V)” (5)
.
Palabras a las que hemos de añadir que por
lingotes con “cola doble de golondrina, debemos interpretar
“labrys” o bien Talentos con la forma de “keftiu” -también
llamados de “hacha doble” y “oxhide”- (6)
.
SOBRE
ESTAS LINEAS: De
nuevo, uno de los
paneles del Museo Arqueológico Nacional, en el que se muestran las
relaciones entre la Península y otras zonas, durante el Neolítico
final y el Eneolítico (aprox. VI al IV milenio a.C). Observemos la
llegada de marfil asiático, del que se han recogido numerosas
muestras en yacimientos dolménicos
(como el de Valencina de la Concepción). Asimismo,
el ámbar del Báltico viajaría hacia el Oriente Mediterráneo por
el camino más corto: Transportado en canoas o barcos, primero por
las costas atlánticas y luego por las mediterráneas
-significando la interrogación que vemos en el panel, una duda;
expresando la imposibilidad de haberse llevado solo por tierra, desde
el Norte de Europa hasta el Mediterráneo Este-.
.
.
JUNTO
ESTAS LINEAS: Imagen
compuesta: En la parte alta, cazuela campaniforme de la Edad del
Bronce Antiguo, hallada
en Huecas y propiedad del Museo de Santa Cruz (Toledo, al que
agradecemos nos permita divulgar esta imagen obtenida en la reciente
exposición ATEMPORA-Talavera 2018). Abajo,
otro mapa nuestro que ya habíamos publicado, en el que recojo la
difusión de los megalitos
(señalando zonas y fechas en las que aparece esa cultura dolménica).
Pero a su vez, marco
con amarillo claro la dispersión del Vaso Campaniforme; que
procediendo de la Península Ibérica (originado en zonas como
Ciempozuelos -Madrid- o Almería) se difunde por el resto de Europa
entre el 2800 y el 1800 a.C.. Finalmente,
entorno a esta última fecha va terminando el Bronce Medio, que acaba
hacia el 1600 a.C.; cuando comenzó paulatinamente el Bronce Bajo
(con tres fases). A mi
juicio, el inicio del Vaso Campaniforme, su difusión y su
desaparición, estaría ligada a los sucesos acaecidos en Anatolia,
El Egeo, Creta y Chipre durante los siglos en que esta cerámica se
promueve desde nuestra Península. Habiendo sido seguramente iniciada
por gentes llegadas desde Oriente Medio (Biblos),
del Egeo (Creta) o de Anatolia (colonias mesopotámicas, dominadas
por hurritas y asentadas junto al Mediterráneo). A su vez,
desaparecería tras el desastre del Tera Santorini; erupción que
entorno al 1680 a.C. destruye la isla de Tera y gran parte de Creta,
llegando a generar terribles consecuencias en Chipre y las costas de
Anatolia.
Ello supone la huida de los habitantes de esas zonas hacia otros
lugares (preferentemente a Canaán) y la entrada de los Hicsos en
Egipto. Todo, en un momento en que los súbditos del faraón
abandonaban sus dominios del Norte -relativamente próximos a Creta-,
marchando hacia el Sur (tras sufrir levemente las consecuencias del
volcán Tera). Dejando así desprotegido el Delta del Nilo, que
entorno al 1660 .C. será ocupado por los invasores llegados desde
Canaán y Anatolia; a los cuales llamaron Hicsos -o reyes bárbaros-.
Una casta nueva compuesta por canaáneos, hititas y sobre todo por
cretenses huidos del volcán Tera; que se impone como nuevos dueños
en el Norte del reino faraónico, durante aproximadamente un siglo.
.
.
.
.
.
.
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.
.
B-
COMENTARIO CRONOLÓGICO, 5000 a.C. - 3500 a.C. - 2700 a.C. (del
Dolmenismo hasta Los Millares, su final y la aparición del Vaso
Capaniforme):
.
Comenzábamos
nuestras cronologías con los primeros tiempos del dolmenismo;
datando entre el 5300 y el 5000 a.C. el inicio de esta civilización
constructora de megalitos y cuya primera fase de nacimiento perdura
aproximadamente durante un milenio
(hasta el 4500 a.C., aproximadamente). Entorno a ese dolmenismo
occidental añadimos que -a
nuestro juicio- se trataba de una Sociedad
ballenera y canoera; no tanto agrícola, como suele afirmarse. Todo
lo que se comprende viendo las tablas climatológicas de seis mil
años atrás o al observar la dispersión y situación de los
megalitos; extendidos principalmente en las cercanías de las costas
(en lugares accesibles desde el mar). Asimismo,
decíamos que a mi entender, esas gentes del occidente atlántico
pudieron mover las piedras ciclópeas, gracias a las sociedades
marineras nacidas de ese mundo ballenero y
cazador de focas; pero sobre todo con medios similares a los que
necesitaban para pescar y sacar los cetáceos del mar (con
grandes maromas tiradas por centenares de hombres solidariamente).
Igualmente pensamos que se dedicaron a la creación de dólmenes,
menhires y cromlechs con fines religiosos y jerárquicos; pero
también por motivos
astronómicos, e incluso para amedrentar a los extranjeros que
visitasen sus tierras (mostrando una Sociedad con una jerarquía y
fuerza extraordinarias).
.
Durante
sus comienzos, levantaron esas piedras ciclópeas en áreas del Sur
de Portugal, costas de Galicia, Bretaña y Sur de Irlanda. Siendo
el ejemplo más destacado de esta etapa inicial, el cromlech de Los
Almendros (en Évora, Portugal). Un
observatorio astronómico que se considera el más antiguo de Europa,
fechándose entorno al 5000 a.C. -en sus primeras fases-. Casi
en época paralela (al final del VI milenio a.C.) daría comienzo la
búsqueda de gemas y ámbar; generando las llamadas “Rutas del
ámbar”, que partiendo del Mediterráneo, conectarán con las
costas atlánticas y llegarán hasta las del Báltico.
Esas
vías marítimas, dos milenios más tarde derivarán hacia otras
expediciones para hallar oro o plata, y finalmente se convierten en
singladuras hacia los metales (durante El Bronce). Principalmente
en el Camino de las Kassitérides (la casiterita); en la busca del
estaño y el cobre -metales imprescindibles en la Edad del Bronce,
pero que apenas había en el Mediterráneo-.
.
Será
entorno
al 5000 a.C.
cuando también
se fecha el comienzo del Egipto Predinástico; con culturas
neolíticas en el Bajo Egipto, como las de El Fayún y Maadi
(donde prevalece la cerámica, cestería y enterramiento en cista con
postura fetal). Mientras
el Bajo Abidos ya estaba habitada y con civilizaciones como la
Baadariense, El Guerzense y la Nagadiense. NABDA
(ó NABTA PLAYA), donde también podremos ver cromlechs. En este
momento hemos de reflexionar para comprender que ya
en Egipto leían los astros de mismo modo que lo hacían en el Sur de
Portugal; a través de cipos elevados en circunferencias,
o bien con menhires que les marcaban las sombras. Pese a ello, los
cromlechs del Nilo a los que nos referimos (de Nabda, ó de Playa
Nabta) eran pequeños y de muy poco peso;
lo que hace ver que quizás consistieron en simples construcciones de
estudio y para enseñar la forma de guiarse en el desierto (a través
de sombras o estrellas). No
pudiendo definirse como cromlechs (propiamente dichos) debido a la
fragilidad y movilidad de sus piezas;
que se podrían desordenar y hasta cambiar de lugar, tan solo con la
fuerza de dos personas. Nada que ver con lo que supone un
verdadero cromlech dolménico, cuyos monolitos habían de
transportarlos centenares de hombres.
.
De
tal manera, es posible pensar que esos antiquísimos observatorios
del Nilo
(como los de Nabta),
quizás fueran una réplica de lo que algunos viajeros vieran en la
Península Ibérica. Pues
si sabemos que el ámbar de Dinamarca llegaba hasta el Nilo, e
incluso a Mesopotamia en esos remotos tiempos. Parece
lógico deducir que algunos de esos navegantes del Oriente
Mediterráneo, que se acercasen con sus cayucos durante los veranos
hasta el Estrecho de Gibraltar (para
hacerse con gemas, oro y con el ámbar del Atlántico); conocieron
en su visita las múltiples construcciones ciclópeas que había en
el Suroeste Peninsular.
Siendo así, en nada
nos debe extrañar que algunos de los pequeños cromlechs hallados en
yacimientos del Egipto Predinástico, pudieran ser imitaciones de los
enormes observatorios astronómicos que desde el 5000 a.C. ya
existían en el Suroeste Peninsular.
.
Acerca
de lo anteriormente expuesto, hemos
de volver a repetir cuanto apuntábamos en nuestra cronología;
explicando la unión que ya ven los arqueólogos entre esas formas de
vida del Egipto Predinástico y las que emergían durante un mismo
tiempo en el Sureste peninsular.
Todo lo que referíamos con las siguientes palabras: En
este momento histórico hay que destacar
un paralelo entre esas culturas del Alto Egipto en el V milenio y el
yacimiento de La Marismilla (Puebla del Río) excavado por el
Profesor José Luis Escacena Carrasco. Antes
de continuar, hemos de expresar al Profesor Escacena nuestro
agradecimiento por el material estudiado y las conclusiones que nos
ha proporcionado (que resultan del máximo interés). Pues estas
excavaciones del yacimiento de La Marismilla aportan numerosos restos
cerámicos, entre los que cabe destacar algunos que demostraban haber
experimentado un proceso de cocción similar y común con las
coetáneas de Egipto. El Profesor Escacena fecha estos hallazgos a
finales del IV milenio a.C. y principios del III a.C.
(7)
. Todo ello lo recoge magistralmente Carlos Manuel Lorenzo, en los
estudios que hemos señalado en cita anterior; donde explica estas
relaciones entre el Bajo Guadalquivir y Egipto; entre el 4500 y el
3500 a.C.. Estos
hechos podrían asimismo explicar la existencia de megalitos en la
zona de Jordania y del Líbano (en las proximidades de Biblos). Unos
conjuntos ciclópeos de Oriente Medio que algunos han querido
destacar como lugar de origen e inicio del megalitismo occidental.
Algo
que resulta absurdo, pues esta
arquitectura dolménica de
Israel, Jordania o Siria, es
posterior a la atlántica y tan solo se da en un área reducida y muy
concreta de Oriente Medio. Todo
lo que -a mi juicio- indica que nació por influencia del megalitismo
atlántico, importado como una “moda extranjera” por los
navegantes orientales que llegaban hasta tierras remotas.
JUNTO
ESTE PÁRRAFO:
Menhir
de Los Almendros, próximo al famoso cromlech (en las cercanías de
Évora,
en Portugal); es uno de los más importantes monumentos megalíticos
de Europa.
Su fecha de inicio se calcula a comienzos del quinto milenio a.C.,
siendo probablemente el más antiguo observatorio astronómico de
nuestro Continente -y uno de los más ancianos de todo el Mundo-.
Tiene
una primera zona de monolitos,
más antigua, formada por unos 24 cipos, dispuestos en tres círculos
y levantada
entorno al 5000 a.C..
Tras ello,
hay una segunda parte añadida muy posteriormente y que se fecha
hacia el 4000 a.C.;
formada por 95 menhires, colocados en elipse (entre los que aquellos
situados en su zona interior, han de datarse en etapa más tardía
-cercana al 2000 a.C.-). Todo
el cromlech presenta diversas figuras grabadas en sus casi 120
monolitos, entre los cuales se distinguen bajorrelieves que aluden al
movimiento de la Luna, el Sol y otros astros.
Al margen de la importancia de este observatorio, sin lugar a dudas
los múltiples megalitos que rodean la zona dieron origen a la ciudad
de Évora; capital alentejana que lleva el nombre de nuestra
Península -la Ibera- (área en el Neolítico hubo de ser una de las
zonas más importantes de Europa). En uno de mis estudios más
curiosos, pude comprobar que el cromlech de Los Almendros y la ciudad
de Évora, están alineados con diversos templos y santuarios
antiquísimos; principalmente ibéricos, e incluso con el más
importante de Grecia: El templo de Apolo, de Delfos (hemos de
destacar que el monte de Delfos fue sacralizado ya en el cuarto
milenio a.C., tal como muestran los restos hallados en sus cavernas,
junto a la cima).
JUNTO,
SOBRE Y BAJO ESTE PÁRRAFO:
Varias fotografías del Cromlech de Los Almendros. Arriba,
mi mujer entre sus monolitos más pequeños y modernos (vemos
la escala de las piezas de menor tamaño del cromlech en su parte
final, hacia el 2000 a.C.). Al
lado, El conjunto en la fase segunda, que se fecha sobre el
4000 a.C.. Abajo, los cipos más
antiguos, datados entorno al 5000 a.C. (perfectamente orientados y
algunos de ellos con marcas astrales).
AL
LADO: Vasijas
Naggadienses, tal como las muestra el Museo Arqueológico de
Florencia (al que agradecemos nos permita divulgar nuestra imagen).
Fechadas entre el 3650 y el 3300 (durante
el llamado Periodo II de Naggada) representan
barcos y danzas que ya hemos estudiado en algunos de nuestros
trabajos. En estas cerámicas podremos observar cayucos de un gran
tamaño, posiblemente solo
hechos para navegar sobre el Nilo (armados con cestería y cañas).
Aunque parece obvio que
durante el mismo tiempo ya pudieran hacer barcos marineros de un
igual tamaño, montados con maderas del Líbano. Una industria
astillera que -al parecer- lideraba Biblos desde el 4500 a.C.;
fabricando naves por piezas, que posteriormente trasladaban por mar y
armaban en el Nilo. Pese a
ello, en el puerto de Biblos armarían sus mejores navíos; para
trasportar esas mercancías y maderas hasta Egipto. Siendo obvio que
los gibliotas también
realizarían continuas expediciones por el Egeo, visitando
continuamente Chipre o Creta. Todo lo que le llevaría a alcanzar
tierras más lejanas en tiempos muy tempranos; pudiendo
haber llegado navegantes de Biblos al litoral peninsular ya a
comienzos del cuarto milenio a.C.. Un momento en que las culturas de
nuestro Suroeste se ven altamente influidas por las pedinásticas de
Egipto; existiendo evidentes paralelos desde el 3700 y el 2800 a.C.,
entre los hallazgos de La Marismilla (Puebla del Rio) y las culturas
que del Nilo.
.
Continuando
con los hechos que recogíamos en nuestra cronología, señalábamos
que desde el
4500 al 3500 a.C. ya de produce el Megalitismo pleno en la Península
Ibérica. Un fenómeno
que sería -a mi juicio-
paralelo con las mencionadas
Rutas
del Ámbar
(gemas, oro y plata); realizadas -a mi forma de ver- a
través de un nomadismo de canoa,
que transitara de Sur a Norte por el Atlántico europeo.
La búsqueda de ámbar, pepitas y gemas,
propiciada por expedicionarios mediterráneos; expandiría
esa cultura dolménica que va difundiéndose por la totalidad de
costas de la Península (especialmente las atlánticas y
cantábricas). Un fenómeno coetáneo, que llega a cubrir también
todo el litoral galo y sube desde el Este de Francia, hacia el Sur de
Irlanda y Gran Bretaña. Extendiéndose posteriormente hacia las
zonas cercanas al mar en Holanda, Alemania y Jutlandia. De tal
manera, tras el 4300 a.C., veremos con profusión en Portugal y
Galicia de túmulos
sobre cámara simple, fosa o simple deposición; siendo esta la época
de máxima concentración de megalitos sobre cámara simple (entre
el 4000 y el 3800 a.C. en Portugal, y hacia el 3900 y el 3700 a.C. en
Galicia). Seguidamente
y desde el 3800-3700 a.C., contemporáneamente a la segunda
concentración de monumentos del tipo anterior, hay otra expansión
de túmulos sobre monumento de corredor. Mientras a su vez, desde el
3700 a.C.
y por efecto de las referidas Rutas
del ámbar (gemas, oro y plata), se
produce la extensión plena del fenómeno dolménico por
las zonas antes señaladas; llegando a todo el litoral francés y
subiendo por Este
de Francia, hacia parte del Sur de Irlanda y Gran Bretaña. Para
alcanzar poco después zonas cercanas al mar en Holanda, Alemania y
Jutlandia.
.
Para
comprender fenómenos coetáneos, así como el lugar del que pudo
proceder el impulso que generarían el dolmenismo y las Rutas del
Ámbar
(a mi juicio promovidas por expedicionarios llegados de tierras tan
lejanas como Oriente Medio y Egipto). Estudiaremos
lo que sucede paralelamente en Malta, como una isla mediterránea y
puerto intermedio
-entre Oriente Medio y nuestras tierras-. Al ser una base perfecta
donde asentarse y desde la que pudieron llegar esos navegantes
neolíticos orientales, buscando el ámbar y oro atlánticos. De tal
manera en
Malta se
levantan ya sus primeros templos y construcciones ciclópeas durante
siglos coetáneos a los dólmenes occidentales; mientras aparecen
también ídolos de tipo femenino en los mismos siglos.
Viviendo esta isla
las siguientes etapas neolíticas
entre el 5.000
y el 4.300 a.C.(recordemos que prácticamente el resto del Mundo
Antiguo vive en el neolítico hasta el tercer milenio a.C.): Fase
Ghar Dalam // 4.500-4.400 a.C., Fase Grey Skorba // 4.400-4.100 a.C.,
Fase Red Skorba //. En
lo que se refiere a la arquitectura ciclópea maltesa,
se observan también tres periodos justo después; realizándose las
primeras construcciones desde el 4100 a.C.; llegándose luego a la
fase de templos como Ggantija (hacia el 3600 a.C.) y más tarde a la
etapa de Tarxien (entorno al 3000 a.C.). Por
cuanto observando y comparando esos periodos y las construcciones de
Malta con los megalitos peninsulares y del Atlántico, nos
encontraremos ciertamente con unos paralelos asombrosos -pese a la
distancia, y aunque aquella isla se sitúa en mitad del
Mediterráneo-.
.
Así
pues, mientras por el occidente atlántico se expande el megalitismo
(entre el 4500 y el 3500) a.C.; en Malta aparecerán las primeras
construcciones levantadas con enormes piedras (entre el 4000 y el
3600 a.C.). Comenzando una nueva fase maltesa en la etapa del templo
de Gagantija (desde el siglo XXXVII a.C.), todo lo que a su vez
concuerda con el inicio de la Cultura de los Millares, al Sur de
España
(en las cercanías de Santafé de Mondújar). Llegándose
a la plenitud de la arquitectura ciclópea maltesa hacia el 3000
a.C.; un momento que -como veremos- es el de plenitud en la cultura
de Los Millares.
Consecuentemente, podremos observar ambos puntos en paralelo, y
tendremos en Malta con fase Zebbug, del
4.100 al 3.700 a.C.; coetánea al dolmenismo atlántico pleno. Más
tarde entrará esta isla en la llamada etapa Mgar, del 3.800 al 3.600
a.C., que coincide con el dolmenismo medio en nuestras tierras y con
el inicio de Los Millares. Pasando Malta
entre el 3.600 y el 3.200 a.C. la fase del templo de Ggantija; todo
lo que coincidiría en la Península Ibérica con los Millares pleno
y la primera llegada del cobre a nuestras tierras. Todo lo que
podemos fechar con las fases maltesas de Saflieni
(3.300 al 3.000 a.C.) y
de Tarxien (3.150 al 2.500 a.C.). Aunque
curiosamente en Malta el metal llega mucho
más tarde y no hay Edad del Bronce hasta el 2400 a.C..
Consecuentemente desde el
2.500 al 2.400 a.C. se
produce un enorme vacío arqueológico;
un posible el despoblamiento de Malta y un cambio de civilización.
Pues
hasta el 2500 a. C. las
aldeas maltesas carecían de murallas y de defensas, aunque al
aparecer el Bronce comienzan a verse pertrechos; todo lo que
manifiesta ataques de extraños o bien la
invasión de culturas ajenas a la isla.
.
Así
pues,
para poder comparar los hechos de la isla maltesas con lo que se
producen coetaneamente en nuestras tierras, tendremos que ver cómo
entre el 3500 y el 2700/2500 a.C. se inicia en la zona de Almería la
referida civilización de Los Millares
(promoviendo un megalitismo bajo; junto a un eneolítico y la
aparición del cobre en el Sur peninsular). Pues
-a mi juicio-, esos contactos
entre el Levante mediterráneo y las costas ibéricas, iniciarían
esa nueva cultura en las Alpujarras, entorno al 3500 a.C..
Civilización de Los Millares que se debe -en
mi entender- a
una clara influencia oriental; lo que demuestra su adoración a un
“dios ojo” muy semejante a los venerados durante igual época, en
Oriente Medio y Mesopotamia.
Por su parte, en estos siglos, El
Megalitismo atlántico cambia de formas y se inician las grandes
tumbas de corredor (tipo Antequera y muy parecidas a las más
antiguas de Irlanda); extendiéndose el eneolítico y el cobre (sobre
todo a fines del cuarto milenio a.C.). Por lo que el calcolítico se
difunde con gran profusión desde la zona almeriense en época
cercana al 2700 a.C., comenzando así el Cobre pleno en la Península.
.
El
conocimiento y difusión del cobre principalmente sería debido a los
Millares, cultura que descendía directamente de la civilización
dolménica; pero que -a nuestro juicio- se crea con la aparición y
establecimiento en nuestras costas, de gentes llegadas desde Asia
Menor, en busca de metales. Primero (después
del 3500 a.C.) por mano de
navegantes que vendrían desde las costas próximas a Tell Brak; una
base Summeria asentada en las cercanías de la posterior Ugarit
(Siria). Aunque finalmente,
creemos que lo que más influyó para la génesis de este Calcolítico
en Almería sobre
el 2700 a.C., sería la llegada de giblitas y minóicos a nuestras
costas (buscando metales).
Por su parte, la aparición de huevos de Avestruz en Los Millares,
así como de diversos objetos absolutamente ajenos al megalitismo,
corroboraría la teoría de que su origen es a la vez que ibero
dolménico, oriental y norteafricano. Asimismo,
en el litoral Atlántico (Portugal y Galicia), desde
mediados del IV milenio a fines del III a.C., desaparecen las
dataciones de túmulos sobre cámara simple, fosa o simple
deposición; pasando a ser sustituidos por los túmulos sobre
monumento de corredor, cuya cronología se extiende hasta ese final
del tercer milenio a.C..
JUNTO
Y BAJO ESTOS PÁRRAFOS:
Al
lado,
dos ídolos oculados summerios. El de arriba, fechado a fines del IV
milenio a.C. y hallado en Tell Brak (ciudad del Norte de Siria);
debajo vemos otro idolillo de Summer, del mismo periodo y hallado en
Uruk (Valle del Eúfrates). Bajo
este párrafo, ídolo
oculado de etapa Los Millares que fue hallado en Extremadura
(colección particular, Toledo). Recogido en tres fotografías por
tres de sus lados; se trata de una pieza en piedra caliza de grandes
proporciones, siendo uno de los mayores y más completos ídolos
oculados que conocemos. En una cara presenta tallados tres soles y en
otra zona dos triángulos que se unen en sus extremos. Sin lugar a
dudas, los tres astros-ojo que se observan incisos sobre el cipo,
deben tener un sentido cósmico y de luz
(relacionados con la visión y los planetas de la luz:
Sol-Luna-Venus-). Mientras
los dos triángulos representarían una figura geométrica
relacionada con la “matemática” y el calendario;
pero a su vez simbolizaría una forma humana esquematizada (a mi
juicio, vestida con espartos o con telas de cáñamo).
En la parte alta parece que contiene un pebetero, habiendo sido
labradas varias circunferencias cerradas sobre su embocadura.
JUNTO
Y BAJO ESTOS PÁRRAFOS:
Al
lado,
los triángulos, tal como están representados en el ídolo anterior
(extremeño, colección particular en Toledo). Abajo,
de nuevo la imagen del idolillo, donde marcamos sus circunferencias,
y triángulos, tal como fueron tallados. Asimismo,
dijimos que esta
pieza sagrada de época Los Millares va rematada por círculos que
tendrían un valor planetario, significando los giros del Cosmos.
Todo ello lo corroboran los astros, igualmente incisos
en la piedra y que se representan como ojos (Sol-Luna-Venus;
probablemente). Pero entre los símbolos que contiene el idolillo,
los
más interesantes son esos dos triángulos unidos en su extremo; que
mostrarían un sistema calendárico y también un tipo de
contabilidad
-incluso un sentido matemático-. En principio, hemos de decir que
-aunque parezca extraño- esta
representación de triángulos se corresponde en gran parte con el
famoso “Tetratkis” de Pitágoras
(pese a que este filósofo griego naciera unos dos mil años después
de la datación del ídolo). Un
sistema matemático que al parecer aprendió el sabio de Samos en
Egipto o en Babilonia y cuya primera correspondencia es la base diez.
Pues la fila última del triángulo suma 4; la tercera suma 3; la
segunda, 2 y la última, 1 ; significando los intervalos y armonía
de la música, en la forma ½; 2/3 y ¾
(que es lo que correspondería si dividimos cada fila por la de
abajo).
Tal
como decimos, el Tetratkis era el símbolo de la armonía universal
(pitagórica), por cuanto significaba los intervalos de la música.
En base a:
1.................
I
2.................
II
3.................
III
4.................
IIII
Siendo
sus resultados 1+2+3+4 = 10
Además
de significar: ½ ; 2/3 ; ¾ -los intervalos de la música antigua-)
.
Cuanto
hemos expresado significaría que durante Los Millares habrían
llegado a La Península teorías planetarias y matemáticas desde
Mesopotamia o de Egipto. Tantas, como para representarse astros junto
a triángulos y pirámides. Debiendo suponerse además que se
utilizaba la base decimal para contabilidad; tal como hicieron en
Egipto y también en Mesopotamia
(donde asimismo se usó la base duodecimal). Una afirmación que
realizamos debido a que estos
dos triángulos entrelazados representados en ídolo de Toledo,
contienen un número total de cinco partes por cada lado; sumando
quince “casillas”, distribuidas en cinco filas (1+2+3+4+5
= 15). Ello, multiplicado por los dos triángulos, suman
treinta; lo que nos lleva a los días del mes en el calendario
egipcio;
cuyas semanas eran de diez jornadas, ya que tres semanas conformaban
los 30 mensuales. Por lo que con
12 meses de 30 días, los egipcios completaban el total del año; una
anualidad de 360 días (igual que los 360 grados de la
circunferencia) a la que se sumaban 5 jornadas más (llamadas
por ellos, epagómenas o festivos; equivalentes a nuestra Navidad y
que cerraban el año de 365 días).
.
Por
todo lo expuesto vemos
que el calendario egipcio se basaba en 5, 10, 30; tal como expresan
estos dos triángulos cruzados que muestra este ídolo de Toledo.
Cuya pirámide de pirámides esculpida junto a los astros nos llevan
a pensar que habla de un contacto entre Extremadura
(donde fue hallado) y
el Nilo
(origen del calendario que expresa). Comunicación
entre la Península Ibérica y el reino faraónico a fines del IV
milenio, que ya ha probado el profesor Escacena
-tal como hemos explicado más arriba-. Precisamente
durante una etapa en que podemos fechar dicho ídolo perteneciente a
la cultura de Los Millares: Entre el 3100
y el 2800 a.C.. Durante
el Periodo Tinita; momento en que se producen paralelos con el
yacimiento de La Marismilla (en Puebla del Río, a pocos kilómetros
al Sur de Sevilla).
Pese
a lo anteriormente expuesto, indudablemente los “ojos”
representados en
gran parte de los objetos de Los
Millares, no eran originarios del Nilo; procediendo
-a mi entender-
de Mesopotamia (concretamente de Tell Brak). Una base sumeria del
cuarto milenio a.C., asentada en
la zona de Oriente
Medio donde
posteriormente estuvo Ebla y Mittani. Esta
ciudad de Tell Brak que adoraba idolillos en forma de ojos-soles,
floreció desde el 4000 al 2700 a.C.; aunque a partir de esa última
fecha comenzó a decaer. Un momento clave en la Historia, pues es por
entonces cuando el Egipto dinástico se expande (con
sus primeras pirámides de Saqqara); alcanzando su onímodo poder
probablemente hasta las tierras de Tell Brak -destruyéndola-.
Por cuanto, la decadencia de Sumer y la pérdida de control sobre
Oriente Medio, debió motivar que otras civilizaciones heredasen las
rutas marinas que hasta entonces realizaban colonias de Mesopotamia
próximas al Mediterráneo.
Especialmente en la búsqueda del ámbar (gemas y pepitas áureas);
que
entre el 4000 y hasta el 2700 a.C. pudo estar dirigida desde Tell
Halaff o Tell Brak. Pero que en el siglo XVIII a.C. pasarían a manos
de cretenses y de giblitas, como aliados de los faraones (los reyes
del Imperio Antiguo).
Por lo que es una hipótesis plausible pensar que ya desde
el 3100 a.C. -cuando Egipto inicia su reino faraónico-, los socios y
las colonias del Nilo commenzaon a navegar periódicamente hacia el
Oeste. Principalmente barcos de Creta y sobre todo de Biblos, la
base egipcia asentada en Oriente Medio, fundada antes del 4500 a.C.
para extraer maderas y construir naves (debido a la falta de bosques
en el Nilo). Pero -a mi juicio- Biblos fue también potenciada
como puerto aliado del faraón, para cerrar la salida hacia el
Mediterráneo de las colonias mesopotámicas asentadas en Asia Menor
(llegando finalmente a hacerse con sus rutas).
.
Cuanto
comentamos corrobora y explica las evidencias arqueológicas de
contacto pleno entre nuestra Península y el Egipto predinástico;
preferentemente, desde el 3200 al 2700 a.C.
(tal como repetidamente venimos señalando). Unas tierras del Nilo
que desde el 4800 a.C. estaban
inmersas en la cultura Nagada I y Nagada II (desde el 4800 al 3800
a.C.; y del 3800 al 3100 a.C.). Pero que
finalmente culminan en el Periodo Tinita (3100 al 2800 a.C.); un
momento en que sabemos tenían contacto pleno con zonas de Bajo
Guadalquivir (como
el mencionado yacimiennto de La Marismilla, excavado por el Prof.
Escacena). Pese a ello, hemos
de tener e cuenta que la base marítima y el lugar desde el que
navegaban los egipcios era Biblos
(situado en Oriente Medio, frente a Chipre). Por cuanto el
Bajo Guadalquivir que tuvo contacto con el reino faraónico -en época
cercana la Era de las Pirámides-; quizás fue tan solo visitado por
giblitas. Siendo muy posible que aquellas expediciones hasta el
lejano Occidente no fueran conocidas por los egipcios del Nilo,
quedando como un "secreto" entre los marineros de Biblos.
Una tierra rica en bosques de cedros -hoy del Líbano-,
que vivió como "base naval" nilota hasta que Egipto se
sintió traicionado por este puerto y lo atacó (hacia el 1500 a.C.,
cuando los giblitas se alían con los canaaneos, sin luchar contra
los Hicsos).
.
Así
pues, es
muy posible que el contacto entre el Bajo Guadalquivir y el Nilo, en
realidad fuera hecho tan solo a través de Biblos y sin el
conocimiento de los faraones; quienes posiblemente ignoraron de la
existencia de aquellas tierras al Oeste mediterráneo, tan ricas en
ámbar y metales preciosos.
Pues desde que
Biblos se funda -por algunos egipcios emigrados, antes
del 4500
a.C.-; parece
que la ciudad portuaria actúa como una base independiente. Teniendo
plena libertad de comercio y viajes, sin deber rendir cuentas al
Nilo; que tan solo le pedía fidelidad política
-una alianza contra los enemigos de Egipto-. Todo lo que afirmamos,
sabiendo que hacia la mitad del V milenio a.C. llevaban desde esa
naciente Biblos y hasta el delta, los cedros en “pateras de
cabotaje”, no como desde una colonia. Sino comprando
y vendiendo los súbditos del faraón esos troncos gibliotas, que
alcanzaban precios desorbitados en tierras nilotas, donde la madera
era un bien muy preciado. Todo
cuanto expresamos se demuestra en el trato que daba Egipto a este
puerto. Pues las
expediciones egipcias hasta esta tierra de bosques, fueron llevadas a
cabo con un carácter más religioso que comercial ya desde el 3000
a.C.
-y durante todo ese tercer milenio-. Viajando hasta allí para
obtener la sagrada mirra, con la que momificaban sus difuntos. Siendo
tanta la importancia del comercio y el trato con Biblos; que sobre el
2650 a.C. (aprox) el iniciador del Imperio Antiguo -el faraón
Snefru- recogió sobre piedra cómo había recibido cargamentos de
madera de cedro desde la ciudad de la montañas del Líbano, para
construir barcos.
Todo
cuanto expresamos puede explicar la existencia de megalitismo en las
proximidades del Líbano, fechado en los milenios cuarto y tercero.
Como un fenómeno importado desde el Atlántico, por los navegantes
de Biblos -o de sus proximidades-.
ARRIBA:
Foto
compuesta con ídolos oculados en piedra caliza y de placa hechos en
pizarra, procedentes de dólmenes extremeños; tal como los exhiben
en vitrinas del Museo Arqueológico de Badajoz (al que agradecemos
nos permita divulgar nuestras imágenes).
Observemos que estas
figuras de pizarra semejan personajes con ojos, vestidos con tejidos
triangulares (probablemente con protectores de esparto). Asimismo,
es de destacar que parecen lucir
placas que recubren su vestimenta, lo que pudieran ser láminas de
armadura (en madera, hueso o concha).
Algo que quizás nos hable de las corazas de esta época; en la que
no existían los metales. "Armaduras"
que pudieron fabricarse cociendo cuero y moldeándolo sobre el
cuerpo; recubriéndolo luego de esparto y “blindándolos” con
placas de conchas o huesos. De ello a mi juicio la importancia de
estos tejidos con formas trenzadas y parecidos al esparto. Un
diseño que no solo vemos como motivo exvoto en el caso de la
sandalia sagrada hallada en Almirazaque o en Valencina (que más
abajo comentaremos). Sino también en el enterramiento de Albuñol,
donde recordaremos que todos sus miembros iban cubiertos enteramente
de esparto y lucían hasta pulseras y cascos de este material (junto
a collares con conchas atados en ese cáñamo).
.
En
referencia a esos dibujos triangulares, hay que destacar que los dos
triángulos del ídolo de Toledo -antes analizado-; no son
propiamente vestimenta o posibles imágenes de esparto. Sino una
figura geométrica perfectamente trazada, con un total de quince
casillas por cada lado opuesto y unido de manera perfecta en sus dos
extremos. Algo
que habla de geometría y de valores de ciertos números; entre los
que
hay que destacar el cinco, que igualmente aparece repetidamente
figurado en cinco triángulos que a menudo lucen muchos de los
idolilos placa. Todo lo que expresaría una base para contar,
partiendo de cinco y diez. La
más sencilla, nacida desde los dedos de la mano y que ya manejaban
los egipcios y mesopotamios desde comienzos del IV milenio a.C.
.
Como
hemos dicho, la fecha inicial para esta civilización de los
megalitos, podemos obtenerla desde la Cueva de los Murciélagos
(datada hacia el 5000 a.C.); donde se halló una reina rodeada de
varios hombres, todos vestidos con cáñamo. Consideramos
personalmente que aquellas gentes vestidas de esparto pertenecieran
ya a una nueva Era: El Eneolítico. Una época donde la cuerda y el
cáñamo serían fundamentales, para armarse, para vestirse y para
fabricar utensilios. Pudiendo
gracias al trenzado de fibras construir y crear con cierta facilidad
una gran serie de objetos y hasta barcos o edificaciones. Llegándose
así a las primeras fabricaciones en serie gracias a los recursos que
las cuerdas y esos tejidos proporcionaban; logrando venderlos o
intercambiarlos y generando una verdadera industria. Todo lo que
supondría el avance del eneolítico, en el que influiría
sobremanera el esparto, como material de utilidad. Un elemento que
realizaría una función semejante a la que hoy tiene el plástico;
permitiendo construir cuanto hasta entonces era mucho más costoso
hacer:
Levantar casas y empalizadas a toda prisa, fabricar armas de mayor
precisión (como arcos o lanzaderas más perfectas), armar barcos con
cuadernas trenzadas y hacer velas de navegación. Ello, unido a la
capacidad de vestirse o calzarse sin necesitar abastecerse de pieles
de animales y a la posibilidad de construir objetos de forma rápida
(como cestas donde se podían trasportar mercancías). Concedió a
esta etapa un sentido semejante al momento en que se inventó el
plástico
(hace apenas unas décadas). No habiendo otra época anterior en la
Historia semejante -en lo que supone una revolución industrial y
social- desde que se descubrió y difundió la cerámica o la
agricultura (entre el 9000 y el 7000 a.C.). Por
cuanto la expansión y cultura del esparto (o del cáñamo), a mi
juicio, debió ser de una enorme prosperidad; tanta como para generar
el megalitismo en Europa.
.
.
JUNTO
ESTAS LÍNEAS:
Vitrinas del Museo de Zuheros (al que agradecemos nos permita divulgar nuestra imagen). En ellas podemos ver algunos enseres hallados en la famosa Cueva de los Muciélagos; enterramiento en caverna, donde se fecha el origen del dolmenismo entorno al 5000 a.C..
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Vitrinas del Museo de Zuheros (al que agradecemos nos permita divulgar nuestra imagen). En ellas podemos ver algunos enseres hallados en la famosa Cueva de los Muciélagos; enterramiento en caverna, donde se fecha el origen del dolmenismo entorno al 5000 a.C..
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BAJO
ESTAS LÍNEAS:
Vitrina
del Museo Arqueológico Nacional con una alpargata exvota de hueso
(agradecemos al MAN nos permita divulgar la imagen. Esta
sandalia votiva procedente de Almiranzaque fue comentada por el sabio
profesor Almagro Basch, quien
nos
dice que ya contiene las mismas características que las lúnulas
irlandesas y los idolillos megalíticos.
Fue
hallada en ese enterramiento dolménico de Almería, en la localidad
de Cuevas de Almazor, cercana a Los Millares. Sus dibujos son iguales
a los del campaniforme y su significado votivo sobre el esparto a mi
juicio deja bien clara la sacralización de este material. Un tejido
que
no solo les
permitía vestir
y crear instrumentos de manera sencilla; sino también
armarse y protegerse (pues los escudos y corazas recubiertos de
esparto, serían francamente seguros en una época en que no existían
los metales).
Ello explicaría por qué en la Cueva de los Murciélagos (fechada
hacia el 5000 a.C. tal como antes mencionamos), algunos de los
difuntos allí inhumados tenían un "casco" de este tejido.
Por
lo demás, otros tipos de cáñamo también concedían una aplicación
médica y bélica. Proporcionando la adormidera una droga que
permitía parir y "operar" sin dolor, aunque también
batallar sin sufrir miedos, ni angustias.
Siendo mi teoría que los ejércitos antiguos proporcionaban este
tipo de drogas a sus soldados antes de entrar en confrontación, todo
lo que actuaba como "una poción mágica" normalmente
realizada con adormideras.
Tras
las afirmaciones anteriores a las imágenes, concluimos tres lugares
en el Mediterráneo que establecieron contacto con la Península
Ibérica, entre el 5000 y el 2700 a.C.. Pareciendo obvio que hubo
intercambios culturales entre nuestras costas con Malta, Tell Brak y
Biblos. Siendo un primer punto de influencia Malta;
lugar probable de paso para aquellos marineros -pescadores o
canoeros-; que buscaban desde el 5000 a.C. ámbar (gemas y pepitas de
oro), con el fin de trocarlas en las playas de Oriente Medio o de
Egipto. Así
pues, hemos visto diferentes etapas paralelas en la construcción de
templos megalíticos en Malta y en la Península Ibérica.
Fases que se pueden sintetizar en una
primera de levantamiento de edificios ciclópeos desde el
4100 a.C., llegándose luego a la de templos como Ggantija (hacia el
3600 a.C.) y más tarde a los de Tarxien (entorno al 3000 a.C.). Todo
lo que concuerda con nuestros periodos de megalitos, que
entre el 5000 y el 4500 a.C. están en etapa inicial, extendiéndose.
Pero que tras el 4300 a.C. los veremos con profusión en Portugal y
Galicia (túmulos sobre cámara simple, fosa o simple deposición);
siendo esta la época de máxima concentración de megalitos.
Seguidamente y desde el 3800-3700 a.C., se da la segunda
concentración de monumentos del tipo anterior, habiendo otra
expansión de túmulos sobre monumento de corredor. Mientras a su
vez, desde el 3700 a.C.
se produce la plena difusión del fenómeno dolménico por Este de
Francia, Sur de Irlanda y Gran Bretaña, o por zonas cercanas al mar
en Holanda, Alemania y Jutlandia.
.
El
problema al observar estos paralelismos entre Malta y la Península
Ibérica es determinar si la influencia constructiva vino desde Malta
a Occidente. Algo que no concuerda con las dataciones; por cuanto los
megalitos elevados en esta isla -sita en medio del Mediterráneo-
probablemente se hicieron a imagen y semejanza de los que vieron en
el Atlántico. Pese a ello, no podemos afirmar que aquellos que
inician la civilización maltesa de los templos ciclópeos, fueron
gentes llegadas desde el Occidente. Siendo más probable que fueran
navegantes venidos desde Oriente Medio o de Egipto, siguiendo
rutas expedicionarias y que dieron con la isla viajando
por el Norte de África o las costas del Sur de Italia. Aunque parece
indiscutible que quienes levantaron esos enormes edificios en Malta
desde el 4100 a.C., lo hicieron inspirándose en los que ya existían
en Occidente. Es decir: Que a mi juicio, los templos malteses siguen
la tradición megalítica iniciada aproximadamente un milenio antes,
en las costas del Sur de Portugal y de Galicia. Siendo esos
primeros templos ciclópeos de la isla (datados hacia el 4100 a.C.)
una versión de los cromlechs, menhires y dólmenes atlánticos.
Todo lo que explica que además de construirse como recintos
sagrados, fueran observatorios astronómicos. Por lo demás, este
hecho no es extraño en la Prehistoria; pues también durante el IV y
III milenio a.C. asimismo aparecen en Oriente Medio megalitos
idénticos a los del Atlántico. Al igual que sucede durante el
segundo milenio a.C. en el Egeo e islas mediterráneas; cuando
los enterramientos en túmulos y cámaras circulares
mediterráneos (de Italia o el Egeo) copian modelos que ya
existían siglos antes en el megalitismo atlántico.
.
Sobre
la hipótesis de una posible migración llegada del Atlántico hacia
las costas maltesas; varias razones nos llevan a considerar Malta
una fundación oriental y no occidental, ni megalítica (pese a
que “copiaran” los edificios sagrados de grandes moles pétreas).
Haciendo deducir que esta isla fue colonizada por navegantes
orientales la perfección de sus construcciones; levantadas
con sillares trabajados, dispuestos de un modo más racional y menos
natural que el dolménico. Asimismo, la calidad de esos templos
malteses, habla de un cultura mucho más relacionada con Oriente
Medio o con Egipto; donde las orientaciones son las que marcan el
modo de levantar el edificio. Mientras en el megalitismo, es la
construcción lo que permite conocer la orientación y el estudio de
los astros -como un observatorio o un calendario y no tanto como un
templo-. A ello ha de sumarse el refinamiento y perfección de la
escultura maltesa, que aparece profusamente desde fines del IV
milenio a.C. en toda la isla; lo que también habla de contactos con
Oriente o bien con El Egeo. Bastando observar sus “damas”
para considerar una unión entre esa isla y el Egipto de Nagadda o
bien con las ciudades satélite de Mesopotamia, asentadas en las
cercanías del Mediterráneo. Aunque a los mayores paralelos de la
estatuaria maltesa, durante los milenios IV al III a.C.; están en el
arte cicládico -de igual y posterior época-. Pero no sabemos si
es el cicládico el que se inspiró en el maltés o viceversa; para
lo que debemos tener en cuenta que la civilización del Egeo es
posterior a la de esta isla. Por cuanto parece evidente que fueron
anteriores los modelos de la estatuaria maltesa y que luego copiaron
en las Cícladas.
.
Finalmente,
es de destacar que Malta
queda en estado de “vacío” arqueológico entre el 2.500
y el 2.400 a.C.; con un posible el despoblamiento y un cambio de
civilización en estas fechas.
Pues
hasta
el 2500 a. C. las aldeas de la isla carecían de murallas y de
defensas, aunque al aparecer el Bronce comienzan a verse pertrechos;
todo lo que manifiesta ataques de extraños o bien la invasión de
culturas ajenas. Unos hechos que no solo refieren la entrada del
nuevo metal en Malta, sino posiblemente la llegada de gentes extrañas
y a mi juicio afines a Egipto
(cretenses y gibliotas -de Biblos-).
Pues hemos de recordar que estas son las fechas de expansión y
comienzo de decadencia en el Imperio Antiguo; donde los nilotas
necesitarán buscar rutas y realizar expediciones, con fines
económicos.
Destacando entre ellos figuras como el faraón Userkaf, que creará
una gran flota para viajar por el Mar Rojo y por el Mediterráneo, en
busca de cobre, estaño, oro, plata, mirra y maderas. Todo
ello en un momento en que Sumer entraría en crisis y Mesopotamia
perdería parte de su fuerza en sus bases de Asia menor (en ciudades
tales como la ya mencionada Tell Brak).
.
A
su vez, se inicia por entonces el Minoico Antiguo II; donde ya Creta
comienza a ser una potencia marítima. El primer florecimiento del
reino de Minos -a nuestro juicio- se relaciona plenamente con el
Egipto Dinástico; pero sobre todo con las fases y crisis del Imperio
Antiguo. Un imponente estado faraónico que "surge" desde
el 2800 a.C., en plena era del Bronce;
extendiendo este nuevo metal por todos sus lugares de influencia y
acabando
en gran parte con la enorme expansión que hasta entonces tuvo
Mesopotamia. Cuyas colonias no solo se situaban en Oriente Medio o en
Asia Menor; sino llegaban en cierto modo hasta las proximidades de
Egipto. Pues las tierras Canáan estaba en dominadas por gentes de su
"orbita"; tanto que su pincipal ciudad -Jericó- había
sido fundada en el 5000 a.C. como un gran centro de agricultura y una
enorme urbe comercial donde se vendían mercancías de Mesopotamia.
Logrando que Jericó fuera el centro
principal, donde durante ese V milenio a.C. se intercambiaron
objetos llevados desde el Tigris y Éufrates al Nilo (y viceversa).
Propiciando ello que desde el 4500 al 3000 a.C. se iniciase ya la
Edad el Cobre en la zona del Sinaí y mil quinientos años después,
la del Bronce (hacia el 3000 a.C., coincidiendo con el comienzo
del periodo dinástico en Egipto).
Todo lo que confirma la influencia de Mesopotamia en la zona de
Oriente Medio y Canaán, hasta la expansión de El Bronce y la del
Imperio Antiguo (entorno al 2800 a.C.).
SOBRE
Y BAJO ESTOS PÁRRAFOS: Arriba,
dos esculturas maltesas
representando “damas” o “maternidades” fechadas en el 3300 y
el 3000 a.C.. Abajo,
dos idolillos peninsulares fechados en el III y II milenio a.C., tal
como los muestra el museo Arqueológico de Cáceres (al que
agradecemos nos permita divulgar nuestra imagen). En
los de Cáceres, tenemos a nuestra derecha, una pieza hallada en
Caminomorisco, toscamente tallada representando una figura diademada;
a la izquierda, otra más alargada, con igual representación y
procedente de Salvatierra de Santiago. Tras
observar los ídolos oculados de Los Millares, junto a estas figuras
de época cercana a la estatuaria de Malta; parece obvio que las
estatuas de la isla mediterránea nada tuvo que ver con la dolménica
occidental. Siendo muy superior la técnica escultórica de Malta,
que tan solo puede tener paralelos con otras coetáneas, como las de
El Egeo, Oriente Medio o Egipto.
JUNTO
Y BAJO ESTOS PÁRRAFOS:
Esculturas y piezas de
arte cicládico fechadas en los milenios III y II a.C.;
en una vitrina del Museo Arqueológico de Florencia (al que
agradecemos nos permita divulgar nuestras imágenes). Como podemos
observar, estas figuras antropomorfas se
relacionan con el tipo maltés. Aunque las de Malta sean un tanto
anteriores a las del Egeo; dado que los primeros ejemplares se datan
hacia el 3300 a.C. y desaparecen entorno al 2500 a.C.. Mientras el
arte cicládico se desarrolla entre el 3000 y el 2000 a.C.. Lo que
nos lleva a pensar que quizás la estatuaria de El Egeo surge bajo la
influencia del arte maltés.
AL
LADO: Dibujo
mío de una escultura que
guarda el Museo de Brookling, representando una bailarina
egipcia del periodo Nagadda II. Pieza
hallada en Ma´mariya y fechada
entorno al 3300 a.C.; que nos puede mostrar quizás, el lugar de
procedencia de los modelos realizados en Malta en igual época.
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C- COMENTARIO CRONOLÓGICO, 2700 a.C. - 2200 a.C. (del la aparición de Vaso Campaniforme; al nacimiento de El Argar y el final de Los Millares):
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C- COMENTARIO CRONOLÓGICO, 2700 a.C. - 2200 a.C. (del la aparición de Vaso Campaniforme; al nacimiento de El Argar y el final de Los Millares):
.
Decíamos
en nuestra cronología anterior que durante el III Milenio a.C. y en
pleno Imperio Antiguo egipcio
-cuando nace verdaderamente la Creta Minóica- ha
de suponerse que expedicionarios llegasen a nuestras tierras.
Navegantes venidos desde zonas cretenses, maltesas y giblitas -de
Biblos-, buscando los metales que aquellos constructores de las
Pirámides necesitarían. Debiendo reflexionarse acerca de las
cantidades mineral preciado que necesitó un imperio como el egipcio;
donde comerciaban con aros de oro, además de adornar a todos sus
nobles, dioses y enterramientos, con aquel metal precioso. Todo
o que nos lleva a concluir que las expediciones faraónicas al reino
de Punt (por el Mar Rojo) no eran suficientes para abastecer su reino
-tan
solo con el oro y plata importados desde Somalia y de tierras
próximas a Saba-.
Necesitando los metales que otras grandes armadas les facilitarían;
principalmente la de Creta y la de Biblos, quienes sabrían llegar
hasta las minas del extremo Occidente mediterráneo.
.
Debido
a ello, comenzaría por entonces la explotación ordenada de
yacimientos peninsulares, como los de Almería y los de Rio Tinto en
Huelva; cuyos inicios se fechan antes del 2700 a.C.
(considerándose fueron trabajados desde esta época por navegantes
extranjeros). Aunque
las minas de estaño y plata almerienses, habrían sido explotadas
antes de la Edad del Bronce; por mano directa de los indígenas y
desde los inicios de la Cultura de los Millares (entorno al 3500
a.C.). Estas últimas, durante la aparición de gentes venidas de
Oriente (desde Tell Brak o de colonias sumerias asentadas junto al
Mediterráneo), que tomarían contacto con megalitistas ibéricos.
Generando así la civilización de
Los Millares, que
desde el 3500 a.C. se expande desde Almería -con
sus ídolos oculados y sus dibujos en forma de astros-. Caracterizada
también por conservar
un
tipo de megalitismo mas constructivo y “menos ciclópeo” -del
existente hasta entonces-.
Manteniéndose en crecimiento Los Millares durante este periodo en
que finalmente
dará comienzo el Calcolítico Ibérico, y que podemos fechar
iniciado entorno al 3000 a.C..
.
Aunque
desde el 2700 a.C., la Península entra en una nueva fase;
precisamente en fechas que coinciden con el inicio de la Era de las
Pirámides. Todo lo que nos hablaría de esa necesidad de metales que
debieron tener los faraones. No solo del oro y plata que
utilizaban para comerciar o en sus ornamentos y ritos; sino
principalmente del bronce (necesario para toda herramienta y
armamento). Pues por entonces, fueron imprescindibles para
subsistir el cobre y el estaño; cuyas minas eran tan abundantes en
tierras del Atlántico, como escasas en el Mediterráneo. Un
motivo suficiente como para que aquellos que supieron levantar
enormes pirámides de piedra, solo valiéndose del bronce; dieran
órdenes a sus súbditos y aliados, para que les hicieran llegar
enormes cantidades de metales preciados. Pudiendo preguntarnos por
qué no fue Egipto directamente quien inició esas expediciones
mediterráneas, dejando a otros -como los giblitas o los cretenses-
el comercio y transporte de minerales preciosos desde el Occidente.
La respuesta es obvia y se halla en el ADN propio del reino del
Nilo: En primer lugar porque no tenían bosques y usaban sus
barcos para navegar por el Nilo o defender sus costas. Pero
principalmente, porque su sistema teocrático era reacio al envío de
expediciones, sobre todo a tierras desconocidas. Pues en esos
viajes por mar a tierras lejanas, se obtenían conclusiones
astronómicas y geodésicas, con las que un simple piloto de nave
podía saber tanto como un sacerdote egipcio. Algo que vemos en
las rutas abiertas por el faraón Nekao; quien es aconsejado por el
clero para no hacerlas, pero las lleva a cabo. Viéndose luego
obligado a ejecutar a los marineros que viajaron, cuando estos
regresan con sus barcos. Pues, tras haber zarpado en un puerto del
Mar Rojo y recorrido África -pasando el Cabo de Buena Esperanza-;
llegando finalmente hasta Gibraltar y el Mediterráneo, para regresar
al Nilo. Expresaron que la Tierra posiblemente era redonda; porque al
viajar por su zona central (el Ecuador) las estrellas comenzaban a
ser distintas y el Sol -además- salía por el lado contrario (de
derecha a izquierda, si miramos a su cenit).
.
Cuanto
explicamos, enseña por qué Egipto era contrario a enviar
expediciones a tierras lejanas, porque además se trataba de un
imperio cerrado y hasta xenófobo. Tal como sucedía con China y en
otros tantos grandes Estados, donde el extranjero era admitido solo
para comerciar; establecido en colonias o ciudadelas (cerca del
mar y apartados de la población). Algo que se muestra en el Nilo
principalmente tras la llegada y caída de los reyes Hicsos (entre
el 1680 y después del 1560 a.C.). Siendo por entonces cuando Egipto
cierra sus puertas a todo extranjero, negándose a viajar en barco
para comerciar; permitiendo establecerse en el Delta del Nilo a
marineros extranjeros, viviendo en ciertas urbes portuarias
-fundamentalmente gigblitas y fenicios que actuaban de mercaderes
para ellos-. Consecuentemente, se entiende que en plena Era de las
Pirámides, quienes se acercasen hasta nuestras tierras no fueran
propiamente gentes del Nilo; sino cretenses y viajeros de Biblos, que
realizaban esa labor de mercado y transporte por mar para los
faraones.
JUNTO
Y BAJO ESTOS PÁRRAFOS: Al
lado, flores secas de
opio. El cáñamo y el esparto proporcionaría durante la Antigüedad
un trenzado con el que fabricaban cuerdas, cestas y todo tipo de
utensilios (hasta
vestimentas). Con las semillas
del opio preparaban infusiones para adormecer durante las
intervenciones quirúrgicas. Pero también daban otros usos al opio;
entre ellos, el bélico y el religioso.
Haciendo trascender por medio de la ingesta de sus aceites, a quienes
deseaban un efecto enteógeno (para comunicarse con el Mas Allá o
con los dioses). De igual forma, mucho ejércitos proporcionaban
drogas como esta a los soldados antes de entrar en batalla. Tanto fue
así que mi teoría etimológica sobre la voz Micenas (que sabemos
procede de la palabra helena “mico” = “seta”); se fundaría
por haber hallado alguna seta alucinógena los micenios, que les
permitía combatir sin sufrir dolor tras ser heridos. Por cuanto se
entiende que “micena” también signifique en griego “contera”
o punta metálica que se cose a una vaina de espada; para que el arma
no haga daño, ni atraviese la funda.
Abajo:
Mi sobrino japonés Tomoki -en primer término y con once años-,
fotografiando las tres
pirámides de Giza. Hemos
de pensar que durante el Imperio Antiguo
(aprox. desde el 2800 al 2200 a.C.),
Egipto necesitó millones de kilos de cobre, estaño, plata y oro.
Evidentemente, estos metales no se obtuvieron tan solo de Somalia
(incapaz de abastecer ese
mercado por entonces); sino
que en gran parte procedieron de las costas de la Europa Atlántica
(Bajo Guadalquivir, Portugal, Galicia, el Cantábrico, Francia,
Bretaña e Islas Británicas).
Así
pues, mientras en Egipto reinaba la III dinastía y se iniciaba la
Era de las Pirámides, con el faraón Djoser (a mediados del siglo
XVIII a.C.), en la Penínsua Ibérica comienza la Edad del Bronce y
el Vaso Campaniforme; junto a numerosos cambios que ya señalábamos
en nuestra cronología. Explicando
como entorno al 2700/2500 se inicia la cultura del Vaso Campaniforme,
que comienza en el Sur (cerca de Los Millares) y va
extendiéndose pronto por gran parte de Europa Atlántica. Estas
tribus peninsulares que usan el Campaniforme, también reutilizarán
los megalitos; haciéndolos suyos después del 2500 a.C., con cierto
vandalismo. A su vez, en la Península el
Calcolítico será superado y esta etapa nos lleva a los albores del
primer Bronce. Aunque hacia el 2250 a.C. aparecerá otra cultura
paralela peninsular, y también del Bronce, como es la de El Argar
(desapareciendo con ella definitivamente Los Millares). El Argar y el
Vaso Campaniforme permanecerán conviviendo, hasta que se extingue la
campaniforme entorno al 1800 a.C.
De tal manera, podemos considerar Bronce Antiguo desde el 2700/2500
al 2250 a.C. y Bronce Pleno desde esta fecha hasta el final del
Campaniforme (del 2250 al 1800/1600 a.C.)-. Por su parte, el Argar se
divide también en tres fases: ARGAR I (2200 a 1950 a.C.); ARGAR II
(1950 a 1750 a.C.); ARGAR III (1750 a 1550 a.C.).
.
En
lo que se refiere al mundo dolménico, volveremos a incidir en el
modo en que se producen sus etapas; pues a partir de mediados del IV
milenio a.C. (desde el 3500 a.C.) en Portugal y Galicia, desaparecen
las dataciones de túmulos sobre cámara simple, fosa o simple
deposición; pasando a ser sustituidos por los túmulos sobre
monumento de corredor, cuya cronología se extiende hasta finales del
III milenio (2200 a.C.). La siguiente vez que detectemos actividad en
los monumentos de corredor será para encontrarnos con
reutilizaciones durante la segunda mitad del III milenio a.C., por
parte de los portadores de vasos campaniformes, que actuan con un
cierto componente vandálico hacia los megalitos. Así pues las fases
desde el 2200 a.C. (apox) finalizan
los túmulos de corredor, mientras en Almería aparece El Argar,
llegándose ya a un Bronce Pleno.
.
Debido
a todo ello, comentábamos en nuestra cronología que
para comprender esta nueva cultura del Vaso Campaniforme -nacida en
nuestra zona Sur hacia el 2700 a.C. y que se expande por toda
Europa-. Hemos de pensar que por entonces nos encontramos en los
inicios del Imperio Antiguo; durante el florecimiento de Biblos y en
los comienzos del mundo Minóico. Debiendo suponerse que desde Biblos
y desde Creta llevarían a cabo las navegaciones y expediciones hacia
el remoto Occidente Mediterráneo; en busca de metales
(para abastecer a Egipto). Con
la llegada a la Península de estas gentes venidas desde el Oriente
cercano al Nilo, creemos se marca el fin del Neolítico y el comienzo
del Calcolítico pleno en Iberia. Pues
de modo coetáneo al progresivo nacimiento y eclosión del Egipto
Dinástico, en nuestros yacimientos encontraremos numerosos
utensilios y armas de cobre.
Por cuanto parece lógico pensar que
los buscadores de metales
(minoicos, giblitas o chipriotas), arribaron
primero a las zonas de Almería (donde abundaba entonces la plata,
el estaño y el plomo). De
estas expediciones hay múltiples testimonios arqueológicos; como
los marfiles aparecidos en los dólmenes de procedencia asiática y
fechados antes del 2000 a.C.. Pero el comercio marítimo entre las
zonas orientales y el Occidente mediterráneo se documenta desde el
Neolítico; existiendo en el Sur de Francia hachas talladas en tipos
de piedra, que solo existen en algunas zonas de las Islas griegas
(concretamente de las Cícladas).
.
Consecuentemente,
afirmamos (en
nuestro modo de ver la Protohistoria)
que desde
el 2700 a.C. se produciría la primera colonización de metalurgios
venidos desde Oriente (Biblos, Chipre, Creta), generando el Bronce
Inicial en Iberia; del cual surgiría la cultura del Vaso
Campaniforme. Ello
sucede en tiempos de las Pirámides y con el fin de buscar metales;
aunque
los expedicionarios que visitaban la Península abrirían también
comercio de cobre y el estaño hacia Oriente Medio (Asia Menor y
Mesopotamia).
De tal manera, sabiendo que los egipcios apenas navegaban, dejando
esta función a su colonia llamada Biblos. Solo cabrían dos
hipótesis para el Origen del calcolítico y el Bronce ibérico: La
primera sería deducir que esta cultura de Los Millares se produce en
el Sur peninsular por influencia del Norte de África, llegando desde
Tassili (Argelia). La segunda -la más realista- sería pensar que
nace del “comercio” y llegada a nuestras tierras de los primeros
Minoicos y giblitas (cretenses y gentes de Biblos que entonces
comerciaban para su gran civilización: Egipto). Pues Creta,
desde el 2900 al 2300 a.C. vive el periodo Minóico prepalacial (fase
I y II; anteriores a la construcción de palacios) y hasta el
1900-1800
a.e.v Minoico
Medio
IB
Proto-palaciego (etapa de palacios más antiguos). Mientras Biblos en
iguales épocas, gozaba de un enorme florecimiento gracias a la
confianza plena del reino faraónico; que
concebía aquel puerto como una base o colonia del Nilo, situada en
Oriente Medio.
.
.
JUNTO
A ESTAS LINEAS:
Nuevamente
publicamos el ajuar “campaniforme” de Fuente Olmedo. Al lado
cinta de oro, el puñal, el brazal de arquero y una punta de flecha
lítica; halladas por Delibes de Castro y Martín Valls en esa
inhumación de Fuente Olmedo
-agradecemos al Museo Provincial de Valladolid (arqueológico Fabio
Nelli) nos permita divulgar nuestra imagen de estas piezas que exhibe
en sus vitrinas-. La
calidad de cobre del puñal que portaba el príncipe y el de las
“palmelas” para venablos, es muy baja. Siendo
metal muy pobre y arsenicado, todo lo que hace pensar en técnicas
del calcolítico. Pese a ello, hemos de observar que también se
encontró una punta de flecha hecha en silex, tal como se fabricaban
en el Neolítico -en imagen, junto a un brazal también de piedra-.
Todo lo que obliga a pensar que las formas de fabricación de armas
sobrevivieron durante milenios. Seguramente
debido a que esos objetos (como las saetas) no eran recuperables, ni
serían piezas de importancia. Lo
mismo pudo suceder con el cuchillo aparecido junto al inhumado en
Fuente Olmedo; una “arma” que por su tamaño y características
parece un utensilio “menor”. Todo lo que explicaría su baja
calidad cúprea; cuya tipología y composición de la hoja (a
nuestra izquierda, en imagen) es parecida a muchas otras armas de
filo de misma época, encontradas en la meseta. Siendo cobre muy
arsenicado, superando en muchos casos hasta el 2,5% de AS. Este
mineral cúpreo tan impuro parece que hacía más duro el metal y por
ello más sencillo para afilar; lo que proporcionaría una mejor
facultad de uso en el caso de estos pequeños cuchillos, tanto como
en las puntas de flecha (Palmelas).
AL
LADO: Las
once puntas de flecha que acompañaban al cadáver de Fuente Olmedo,
tal como las exhibe el Museo Provincial de Valladolid -al
que agradecemos nos permita divulgar nuestra imagen-. Estas piezas
llamadas comúnmente “palmelas” (por haber sido estudiadas por
primera vez en esta población lusa cercana a Lisboa) son
de baja calidad metalúrgica. Con una composición cercana a la del
puñal antes mencionado (cobre
muy arsenicado)
y también muy parecida a otras “palmelas” halladas en la Meseta.
Por este motivo, los profesores Delibes y Martín Valls mencionan que
sus fabricantes -probablemente- aprovecharon aquella enorme cantidad
de arsénico en el mineral cúpreo, para configurar un filo fácil de
trabajar, con unas características muy especiales de dureza
(diferente
a uno de metal más puro; que no tendría tanta facilidad de corte y
afilado). Llama la atención el
número de flechas que acompañaban a este “principe”
campaniforme; que suman un total de once. Una cifra extraña y ajena
a otras culturas del momento. Como la mesopotámica o la egipcia;
cuyas bases de contabilidad eran duodecimal (en el caso de
Mesopotamia) y decimal, en la del Nilo. De ello, el
número de venablos quizás nos indicaría que el ajuar no contiene
un valor predeterminado, ni un carácter tan mágico; siendo
probablemente un enterramiento ocasional sucedido tras una batalla.
Después
de un enfrentamiento bélico en el que moriría aquel guerrero, que
por ello hubo de ser inhumado en este lugar. Todo
lo que se corroboraría por la ausencia de otras tumbas en los
alrededores y por la inexistencia de hallazgos o de asentamientos
campaniformes cercanos (sin
otros poblados o restos de la época en esos pagos de Fuente Olmedo).
.
ABAJO:
De
nuevo publicamos la reconstrucción de la tumba de Fuente Olmedo, tal
como la exhibe actualmente el Museo Arqueológico Nacional -al
que agradecemos nos permita divulgar nuestra imagen-. En
la fotografía podemos ver el modo en que estaba situado este
“reyezuelo” del
Bronce Pleno: Depositado
en su cenotafio de lado, luciendo una cinta de oro en su frente,
junto a puntas de flecha, portando un pequeño puñal de lengüeta y
acompañado de algunas cerámicas campaniformes
(en las que pudo saberse había restos de “cerveza” -bebida de
cereales fermentados-).
ABAJO:
Foto compuesta con piezas
argáricas. A la izquierda, una diadema de oro, procedente de
Caravaca; tal como la expone
el Museo Arqueológico Nacional (al que agradecemos nos permita
divulgar nuestra imagen). A
nuestra derecha, una copa argárica donada
por la familia Borja-Berenguer al Museo Arqueológico de Alicante (al
que agradecemos nos permita divulgar nuestra imagen). Ambas piezas se
datan entre el 2200 y el 1600 a.C..
ABAJO:
Diversos vasos campaniformes,
tal como los expone el Museo Arqueológico Nacional (al que
agradecemos nos permita divulgar nuestra imagen)
D-
COMENTARIO CRONOLÓGICO, 2700 a.C. - 2200 a.C. (Oriente Medio, Egipto
y el Mediterráneo):
.
Habíamos
explicado repetidamente que desde el 3100
al 2800 a.C.,
Egipto entraba en Periodo
Tinita; fase donde se unifican los reinos del Alto y Bajo Egipto con
capital en Tinis. Pasando más tarde Imperio Antiguo del 2800 a 2200
a.C., en la que trasladas la ciudad
principal a Menfis; siendo el rey símbolo de díos y del poder
central, comezando la etapa de grandes obras faraónicas. Por
su parte, en Oriente Medio. Mesopotamia había perdido muchas de sus
ciudades satélites en Asia Menor, que iban cayendo en manos de
nuevos pueblos semitas nacidos en la zona; tal como eran los
Amorritas y los Hurritas. Quienes desde el 2700 a.C. van extendiendo
su poder hasta hacerse con Canaán y las proximidades de Egipto;
tanto que hacia el 2750 a.C. Biblos se ve sometida a esas invasiones
amorritas. Tribus
que se fueron fortaleciendo en El Creciente Fértil, y que desde el
2300 al 2000 a.C.
-buscando las vías de comercio de los cedros- emigraron
de la actual Península Arábiga en dos direcciones: Los primeros
hacia Mesopotamia, fundando luego Babilonia; los segundos hacia
Palestina-Fenicia, invadiendo y creando un nuevo Canaán.
.
Es
entonces, hacia el 2200 a.C., cuando entran estas nuevas hordas
guerreras venidas del desértico Sureste, destruyendo y cambiando las
antiguas ciudades de Canaán y Medio Oriente. Todo lo que repercutirá
en el Egipto faraónico, que por entonces se tambaleaba debido a
revueltas internas; estando tan debilitado, que tras este último
golpe y con la aparición de los amorritas cae el Imperio Antiguo
(1280 a.C. aprox.). En esta situación de crisis, los recientes
dueños de Canaán vuelven a atacar Biblos, la urbe costera más
importante del litoral y que por entonces tendría más de dos mil
años de Historia. Así,
sobre el 2200 a.C. -tras
invadir el área- esas
mismas tribus se alzan también contra Mesopotamia.
Su nombre que era un apelativo sumerio; quienes llamaban “amurru”
a estos “Occidentales”, ya que “amorrita” en lengua de Summer
significaba “venido de Oeste”. Así hemos
de pensar que los Amorritas fueron una unión de pueblos
trashumantes, que se unificaron con el fin de liberarse del gran
poder comercial y político de Egipto en la zona de Canaán.
Consiguiendo primeramente y para ello, un gran apoyo de Mesopotamia.
Pero más tarde sublevados contra sus protectores, tanto que al
vencerlos crearían Babilonia. Por
su parte, no hay que desestimar una teoría (propia), por la que
estos Amorritas fueran siglos más tarde llamados “Apiru”, origen
y primer nombre de los Hebreos.
.
Durante
estos momento y en plena caída del Imperio Antiguo faraónico (2200
a.C. aprox.), en la Península Ibérica ya vimos que aparecerá
la tercera cultura del Bronce como fue El Argar. Desaparece por
entonces Los Millares, que había surgido hacia el 3500 a.C.
(en paralelo con la cultura de Nagadda II en Egipto); a la que había
seguido la segunda cultura peninsular del Bronce: El Vaso
Campaniforme, originado hacia el 2800 a.C., nacida también en
paralelo con el Egipto Dinástico. En lo que se refiera a El Argar
permanecerá conviviendo con el Campaniforme hasta el 1800 a.C.; por
cuanto podemos considerar Bronce Antiguo peninsular desde el
2700/2500 al 2250 a.C. y Bronce Pleno desde esta fecha hasta el final
del Campaniforme (del 2250 al 1800/1600 a.C.). En
lo que se refiere a Malta, comienza la Edad del Bronce desde el 2500
a.C.; por cuanto desde el 2400
al 1500 a.C. se produce la Fase Cementerio de Tarxién con nuevos
colonos, sin continuidad con las fases
anteriores. Como ya hemos dicho, hasta
el 2500 a. C. las aldeas maltesas carecían de murallas y defensas,
pero al aparecer el bronce comienzan a verse pertrechos. Esa
fase de Primer Bronce (llamada cementerio de Tarxien) durará unos
mil años. Finalmente, entre el 1500 a. C. y el 725 a. C., muchos de
los valles son abandonados y pasan a construcciones seguras en las
colinas, fortificándolas; estos nuevos edificios recuerdan a los
minóicos y por entonces aparecen las primeras fortalezas.
Comparativamente con la Península Ibérica; la entrada del Bronce es
mucho más tardía en Malta, con una diferencia de unos trescientos
años de retraso. Todo lo que hace ver que la isla estaba menos
comunicada con Oriente Medio, que nuestras tierras.
Ya que las innovaciones y nuevas épocas (como fueron el cobre y el
bronce) tardaron siglos en llegar a las playas maltesas; apareciendo
varios siglos después que en las costas españolas.
.
Por
su parte, Cerdeña había permanecido en el Neolítico hasta el 3000
a.C. (como la mayor parte del Mundo
Antiguo). Aunque en su caso no llegarán
allí los primeros metales hasta ese siglo XXX a.C..
De tal manera los periodos de este neolítico final sardo son: Desde
el 5300 al 3000 a.C. // 5300 a.C. al 4000 a.C , Cerámica
impresa y cardial // 4000 a.C. al 3240 a.C: Cultura de Bonu Ighinu //
3240 a.C. al 2700 a.C.: Cultura de San Ciriaco. Por su parte, el
Eneolítico sardo (2700 al 2300 a.C.) tiene las siguientes fases:
Del 2700 a.C. al 2500 a.C: Ozieri Clásico // del 2500 a.C. al 2300
a.C.: Ozieri Pintado. Finalmente la Edad del Bronce en Cerdeña
(2300 al 1000) se fija con los siguientes periodos: Del 2300 al
2250 a.C: Filigosa // del 2250 al 2100 a.C.: Abealzu // del 2200 al
2100 a.C.: Montecaro // del 2100 al 1600 a.C.: Campaniforme // del
1600 al 1500 a.C.: Bonnano // . Las dos últimas etapas son ya
plenamente campaniformes y por lo tanto están en relación con la
expansión de culturas peninsulares ibéricas. Finalmente diremos
que el Bronce Antiguo sardo se distingue en dos fases: Del 2300 al
2000 a.C.: BRONCE ANTIGUO I , Bonanno // del 2000 al 1700 a.C.:
BRONCE ANTIGUO II, S. Iroxi //.
ARRIBA:
Mapa de la expansión del
Vaso Campaniforme, desde sus orígenes en Almería (2800 a.C) hasta
su periodo final (entorno al 1800/1600 a.C.). En
este plano que he trazado, podemos
comprender fácilmente su divulgación por mar y tierra (siguiendo
ríos o rutas costeras), avanzando hacia zonas de minas
(preferentemente con yacimientos de estaño y cobre). Debido ello, el
Campaniforme llega hasta Cerdeña y Córcega, donde existían filones
de casiterita y minas cúpreas. En aquellos otros lugares de Europa
que aparece el Vaso Campaniforme y que carecían de estaño o de
cobre, existían grandes fondos de ámbar
(Jutlandia, litoral de Países Bajos y Norte de Alemania); tanto
como de oro y plata (Sur de
Portugal, Norte de España y en las costas de Francia e Inglaterra).
.
ABAJO:
Mapa nuestro del megalitismo;
sus fases y expansión. Tal
como hemos dicho, las primeras manifestaciones de esta arquitectura
ciclópea, aparece hacia el
5000 a.C. en el Sur de Portugal, Galicia, Bretaña y sur de Irlanda.
Todas ellas, tierras riquísimas en oro o en ámbar.
Asimismo, se producen
construcciones ciclópeas, en
Malta (isla de paso entre Oriente y el Atlántico); donde ya
en el 4100 a.C. veremos las
primeras manifestaciones de ese tipo. Posteriormente,
entre el 4000 y el 3000 a.C. el fenómeno dolménico
occidental se extiende, desde
los puntos originarios y hacia: La
costa atlántica
y el Suroeste de la Península (Extremadura y Andalucía), el
Cantánbrico, el litoral atlántico francés, el Sureste de Gran
Bretaña, el Sur de Irlanda, Norte de Europa (llegando a Jutlandia).
A su vez, en los mismos años
se divulga ese megalitismo hacia el Mediterráneo, por todo el
litoral Norte de África cercano a la Península, llegando a la
actual Túnez y pasando de nuevo a Malta, donde se genera una nueva
etapa de construcciones ciclópeas. Finalmente, entre el 3000 y el
2000 a.C., el megalitsmo ya se extiende hacia el centro peninsular,
alcanzando zonas como Toledo,
Burgos o Valladolid. De igual forma veremos
ya megalitos en todos los lugares de Europa, por entonces ricos en
minas de cobre y estaño; en especial al Este de Francia, Centro
Europa, Alemania y el Báltico; donde no había llegado hasta
entonces este fenómeno. De
manera paralela, por el
Mediterráneo avanzó el megalitismo durante ese tercer milenio a.C.
hacia las minas de estaño y cobre; llegando a Córcega, Cerdeña,
Sicilia (que junto al litoral
catalán y las Baleares, eran punto de paso o bien tierras ricas en
yacimientos cúpreos o de casiterita).
.
Para
terminar diremos que en lugares de Canáan y Oriente Medio, aparecen
megalitos que algunos pretenden fechar antes que los occidentales
-sugiriendo que son el punto de nacimiento del dolmenismo atlántico-.
Esta última hipótesis es absurda, pues si
el origen de la arquitectura ciclópea estuviera en Oriente Medio,
esta no se observaría tan solo en unos focos muy concretos
(de Líbano, Jordania o Palestina); sino
se extendería por gran arte del área. Además, las altas dataciones
que teóricamente presentan esos dólmenes orientales, no han sido
nunca confirmadas; pudiéndose
determinar tan solo que fueran del cuarto y tercer milenio a.C.. Todo
lo que lleva a pensar en una moda importada desde Occidente a las
cercanías de Biblos, traída
por navegantes del calcolítico y la Edad de Bronce.
Tal como sucede en El Egeo durante la etapa micénica, donde se
construyen tumbas de corredor y cúpula con formas y técnicas casi
iguales a las usadas decenas de siglos antes en el Atlánico,
para levantar túmulos de corredor.
E-
CONCLUSIONES:
.
Observando
los periodos de Cerdeña, pronto hallamos paralelismos con la
Península Ibérica, no solo por la llegada del Vaso Capaniforme a la
isla desde el 2100 a.C. (al igual que sucede en Sicilia). Sino,
además, por sus fechas y fases durante la Edad del Bronce. Así
pues, mientras en nuestras tierras aparece el Bronce entorno al
2700 a.C. (tras haber llegado el calcolítico sobre el 3000
a.C.); en Cerdeña es el eneolítico lo que comienza en ese 2700
a.C.; señalándonos que el mundo vinculado con los metales -el
de Egipto, Mesopotamia y Oriente Medio- hasta esa fecha no
visitaba Cerdeña,pero había llegado a nuestras costas. Ello,
pese a que en esta isla existían numerosas minas de cobre y de
estaño; aunque quizás el motivo esté en que estas últimas
proporcionan una casiterita muy pobre y plúmbea, que daría un
bronce débil y quebradizo. Sea como fuere, parece innegable que
Cerdeña en el 2700 a.C. estaba prácticamente fuera de las rutas del
metal orientales, mientras Iberia (mucho más lejana) ya se
incorporaba al mundo del bronce. Una nueva tecnología que -a mi modo
de ver-, expandiría el famoso Vaso Campaniforme desde la Península.
Creando a un mundo de buscadores y forjadores de bronce, que desde
esa fecha (2700 a.C.) florece primero en nuestras tierras y luego por
Europa atlántica; llegando hasta la Europa del Norte, a Centro
Europa y alcanzando islas como Córcega, Cerdeña y Sicilia.
.
Todo
lo que nos habla de una civilización occidental y minera, originada
en las inmediaciones de Almería, entorno al 2800 a.C. -cuando
nace el Egipto Dinástico- y que llega a difundirse prácticamente
por toda Europa, incluyendo sus islas (ver mapa arriba, con
difusión del Campaniforme). A esta civilización de las cerámicas
en forma de campana, hemos de sumar la otra gran cultura
procedente del remoto atlántico peninsular, como fue la
dolménica. Cuya dispersión de construcciones megaliticas durante
el tercer milenio a.C., nos ayuda a comprender muy pronto cómo a
partir de esa fecha (el 2800 a.C.) aparece una nueva civilización de
buscadores de metal. Gentes del Mundo Campaniforme, que van avanzando
sobre Europa atlántica y el Mediterráneo del Oeste. Promoviendo la
creación de dólmenes, menhires y cromlechs; ya con diferentes
formas y de “tipo irlandés”: Tumbas de corredor, con cúpula
y levantados con lajas (sin grandes piedras ciclópeas en las
paredes). Una nueva cultura unida al dolmenismo y al Campaniforme,
en la que podremos ver construir cenotafios y observatorios
astronómicos, con iguales técnicas en el Norte de Europa o en medio
del Mediterráneo -tanto en las Islas Británicas como en Jutlandia,
en Almendralejo y hasta en Cerdeña o Sicilia-. Algo que nos habla
claramente de un comercio de metales que transitaba desde el 2700
a.C.; viajando desde el Norte Atlántico, las costas de Francia y las
de España, llegando hasta Oriente Medio y Egipto (pasando por islas
como Malta, Cerdeña o Sicilia).
.
Esta
cultura metalúrgica del Bronce, que hubo de expandirse en busca del
cobre y del estaño (imprescindibles
en la época, pero escasísimos en el Mediterráneo),
sería protagonizada por aquellos hombres del Vaso Campaniforme. A
quienes debemos la llegada paulatina de la Edad del Bronce por todo
el Occidente continental (desde
Jutlandia a las Islas Británicas). Tratándose
de la segunda gran cultura nacida en Europa, por ser heredera de Los
Millares; su civilización antecesora surgida también en Almería
unos ochocientos años antes
-probablemente a través de expediciones llegadas desde Tell Brak o
de Tell al Hallaf (promovidas por los sumerios, que precisarían de
oro, gemas y ámbar)-. Así
pues, la primera gran cultura de la Europa Occidental -conocida como
tal- fueron Los Millares; que desde el 3500 a.C. al 2200 a.C.
expandió el eneolítico y posteriormente el calcolítico
(con la llegada del cobre a la Península Ibérica cientos de años
antes que a otros lugares más cercanos a Oriente Medio o Egipto). La
segunda gran cultura occidental sería esta del Campaniforme, nacida
hacia el 2800 a.C. y que desaparece entorno al 1800/1600 a.C.
(probablemente debido a la caída del Imperio Minoico con la
explosión del Tera-Santorini). Mientras
la tercera civilización del Bronce fue El Argar (2200 al 1550 a.C.);
que sustituye a Los Millares y surge en paralelo a la caída del
Imperio Antiguo egipcio; para terminar en fechas iguales al
nacimiento del Nuevo Imperio faraónico (tras la caída del reino
Hicso).
.
Consecuentemente,
si realizamos paralelamente cronologías con Malta y el mundo sardo;
hemos visto que en Cerdeña el Eneolítico
comprende desde el 2700 al 2300 a.C., mientras su Edad del Bronce se
data del 2300 al 1000 a.C.. Al igual que en Malta no llega al Bronce
hasta el 2400, permaneciendo la Isla en esta fase al menos hasta el
1000-750 a.C.. Lo que indica que los primeros expedicionarios
llegados desde Oriente Medio o de Egipto; tuvieron contacto pleno
mucho antes con la Península Ibérica, que con esas islas centrales
del Mediterráneo. Por lo que en Iberia el calcolítico comienza
antes del 3000 a.C. y el Bronce Inicial entorno al 2700 a.C..
Mientras Cerdeña durante la fase del 2700 al 2300 a.C. aún
permanecía en el eneolítico y a Malta hasta el 2400 no conocerá el
Bronce.
.
Todo
ello nos muestra unos expedicionarios venidos desde Oriente Medio o
del Levante Mediterráneo, llegando primero a nuestras tierras -para
trocar ámbar y pepitas de oro-. Viajeros que ya desde el 3000
a.C. procederán de un mundo inmerso en la Edad de los Metales;
procurando la búsqueda de yacimientos de mineral precioso (oro,
plata, cobre y estaño). Hechos que irán generando paso a paso las
distintas fases del Atlántico; donde el megalitismo se expande
conforme crece esa trashumancia marinera que transportaría gemas y
metales de Norte a Sur, para hacerlas llegar al Mediterráneo. De
este modo, aquellas gentes de Oriente medio llegadas durante los
veranos buscando en nuestras costas ámbar, minerales y metales; en
su unión y contacto con el megalitismo, fructificarían como esas
nuevas culturas -explicadas-. Generando unas civilizaciones mineras y
metalúrgicas que se expandirían por toda la Europa Occidental y sus
islas. Naciendo de esa fusión entre el dolmenismo y los llegados
del Levante mediterráneo, primeramente Los Millares (3500-2200 a.C.)
más tarde el Vaso Campaniforme (2800-1800 a.C.) y El Argar
(2200-1600 a.C.). Culturas que se originan y desaparecen de
modo coetáneo con diversas fases de Oriente Medio, del Egeo o de
Egipto; pero que en su entorno europeo difundirán nuevos estilos y
formas constructivas. Expandiéndose desde nuestra Península a
Francia, las Islas Británicas, costas de Holanda, Alemania,
Jutlandia y centro Europa; aunque asimismo lo hicieron por el
Mediterráneo, aculturando hasta Cedeña y Sicilia.
AL
LADO Y ABAJO: Megalitismo
en Japón. Al lado: Maquetas
de dos dólmenes de Kannon Yama excavados en la prefectura de Gunma
(Japón) tal como las muestra el Museo Arqueológico de Gunma -al que
agradecemos nos permita divulgar nuestra imagen-. Desde
el 250 de nuestra Era y hasta el 750, se desarrolla en tierras
nipponas el periodo llamado Kofun (de “dólmenes”). Estos
enterramientos fueron promovidos por las grandes influencias
importadas desde la cercana península de Corea, donde se hallan
algunos de los yacimientos con más megalitos del Mundo.
Estableciéndose desde entonces la
inhumación en dólmenes, como un sistema que antaño practicaban las
clases más altas japonesas -aunque actualmente solo la siguen
manteniendo en la familia del emperador-.
La proliferación de dólmenes (kofun) en zonas como Gunma (a unos
cien kilómetros al Norte de Tokio), se debió a que por aquel
entonces esta prefectura fue el centro “capital” nippón -unos
mil quinientos años atrás-.
.
Abajo:
Cartel de entrada al dolmen de tipo “ojo de cerradura”, donde
vemos el plano del cenotafio y asimismo el lugar en que fueron
halladas las “Hanniwas”
-figuras de terracota enterradas-. Ya que de manera similar al túmulo
del emperador Quin Shi Huang (creador de la China); que se inhumó
junto a centenares de guerreros en figuras de terracota.
Los antiguos japoneses de enterraban en túmulos (simples o de
corredor) donde asimismo guardaban figuras de cerámica.
Hemos de pensar que estas piezas
de barro llamadas Hanniwas (algunas
de ellas de gran tamaño, superando el metro y medio de altura) se
situaban en la tumba del señor, como exvotos. Seguramente cambiando
la costumbre de ofrecer al fallecido vidas humanas, sustituyéndolas
por piezas de cerámica. Cambiando así parte del antiguo y terrible
rito de matar a los súbditos y viudas del finado. Mujeres del harén,
junto a los servidores más próximos y algunos de los más
importantes guerreros; que solían ser ejecutados cuando moría el
señor. Seguramente como un modo de “devotio”, para asegurar al
gran noble que todos procurarían darle larga vida y nadie de su
entorno le traicionaría; al saber que cuando aquel señor fallecía,
ellos morían también. Posiblemente fue este el sentido de las
Hanniwas e incluso de aquellos guerreros y caballos que se cuentan
por miles en la tumba del famoso emperador Quin Shi Huang. Y
seguramente también tuvieron un significado muy semejante con ritos
parecidos llevados a cabo en el Mediterráneo Antiguo (como las
terracotas de Mirina y Tanagra, que introducían los helenos en los
cenotafios).
AL
LADO Y ABAJO: Dolmenismo en Japón.
Al lado:
Entrada al dolmen de Kannon Yama, en Gunma
(mi mujer y mi sobrina frente a su “puerta”; actualmente abierta
y con una reja). Una
teoría tan extendida como admitida sobre el megalitismo, afirma que
fue un movimiento constructivo cuyo comienzo se fecha hacia el 5000
a.C. (en el extremo occidente Europeo -Sur de Portugal, Galicia,
Irlanda y Bretaña); pero que
desde entonces se ha ido extendiendo hacia el Este. Así sucedió
durante los dos primeros milenios, en que se construyeron estas
formas de cenotafios y de observatorios astronómicos por toda Europa
(llegando a Oriente Medio). Más
tarde, el fenómeno megalítico se extendería por el Sur de Italia y
saltaría a las islas cercanas (Córcega, Cerdeña y Sicilia),
llegando posteriormente al Egeo; donde los cenotafios micénicos
tuvieron un diseño similar al de las tumbas de corredor dolménicas
que se levantaban en nuestras tierras mil años antes. Seguiría
aquel viaje del megalitismo hacia el Oriente,
convertido en cenotafios de los pueblos esteparios y de los
indoeuropeos caucásicos. Destacando los escitas, que se enterraban
en túmulos a mediados del primer milenio a.C.; y los túmulos de
Aguidea, contemporáneos a Alejandro Magno. En
lo que se refiere a China, tenemos como ejemplo más destacado de
este tipo de enterramiento, el caso -ya citado- del primer emperador
Quin Shi Huang; inhumado en un enorme túmulo junto a miles de
guerreros. En el caso de Japón, la etapa de los enterramientos en
megalitos (kofún) se inicia entorno al 250 d.C. y es cuando se
inicia el sistema y el reino nación del Sol Naciente. Cuya creación
podemos fechar en la tercera etapa de “kofún”, a comienzos del
siglo VI d.C., cuando los emperadores y grandes señores del Japón
comienzan a enterrarse en dólmenes con forma de ojo de llave (tal
como el que vemos).
Actualmente, la familia real nippona sigue inhumándose en este tipo
de tumbas; por lo que muchas no han podido ser aún excavadas, debido
a que siguen en uso como cementerios de los emperadores y sus
antepasados.
Abajo:
Interior del dolmen de Gunma, en
el que se observa que se trata de un enterramiento de corredor, hecho
con paredes de piedras y con una gran losa encima. Su
tipología es igual que la que observamos en muchos cenotafios de
Irlanda o de España entorno al 2700 a.C. (como en el caso de la
tumba de Almendralejo -Huerto Hornina-).
ABAJO: Exterior del dolmen Kannon
Yama de Gunma; al lado, mi mujer junto a mi sobrina (lo que puede
darnos idea del tamaño del cenotafio). Se
cuentan por decenas de miles, las tumbas megalíticas halladas en las
islas japonesas. Durante una primera fase fueron más sencillas, pero
desde el año 400 d.C. se comienzan a construir en forma de ojo de
llave; como grandes túmulos con montañas. Desde
el 475 al 710 se da la fase “kofún final”; donde ya las cámaras
son de corredor; usando grandes megalitos en sus
techos (tal como el que vemos). Durante
este último periodo se generaliza la transmisión de poder
relacionada con el enterramiento; siendo el derecho a la tumba lo que
hace que se herede el gobierno de una zona. A esta cultura y época
pertenece la familia real de Japón; originada en el sigo VI d.C. y
cuyo rito de inhumación permanece aún en el megalitismo. Pues de
algún modo, el derecho al trono de Japón se relaciona con la norma
heredada que concede el derecho a ser enterrado en un dolmen.
.
.
ESTE ARTÍCULO TIENE UNA SEGUNDA PARTE, TITULADA:
COMENTARIO A LAS CRONOLOGÍAS, PARTE II: DESDE EL 2200 HASTA EL 1000 a.C.
PARA LLEGAR A ELLA, PULSE SOBRE EL SIGUIENTE ENLACE.
https://loinvisibleenelarte.blogspot.com/2019/02/comentario-las-cronologias-parte-ii.html
.
.
ESTE ARTÍCULO TIENE UNA SEGUNDA PARTE, TITULADA:
COMENTARIO A LAS CRONOLOGÍAS, PARTE II: DESDE EL 2200 HASTA EL 1000 a.C.
PARA LLEGAR A ELLA, PULSE SOBRE EL SIGUIENTE ENLACE.
https://loinvisibleenelarte.blogspot.com/2019/02/comentario-las-cronologias-parte-ii.html
.
-----------------------------------------------------
CITAS:
-----------------------------------------------------
(1):
A
LOS INTERESADOS EN LAS CULTURAS CANOERAS, COMO LAS QUE PUDIERON
EXISTIR EN LA EUROPA ATLÁNTICA DURANTE EL MEGALITISMO Y LA EDAD DEL
BRONCE, RECOMENDAMOS LEER:
LOS
PRIMITIVOS MORADORES DEL "FIN DEL MUNDO" -en Chile- COMO
HIPÓTESIS ARQUEOLÓGICA PARA LA COMPRENSIÓN DEL MEGALITISMO EN
EUROPA (Capítulo 115 de: "Los bueyes de Gerión en el Tesoro de
El Carambolo".
PARA
LLEGAR AL ARTÍCULO, PULSAR ENLACE:
.
(2):
HABÍAMOS
DEDICADO VARIOS ARTÍCULOS A ESTUDIAR LA CITA SOBRE ESTOS ESTAÑOS
NEGRO Y BLANCO QUE SE DICE, MIDAS COMPRABA EN EL ATLÁNTICO. LO
QUE MENCIONAN:
Higino,
Fábula 274 "Midas rex, Cibeles
filius, Phryx
plumbum album et nigrum primus invenit" (que tambien se
encuentra mencionado en
Casiodoro Var.
3,31). Y la mención que del rey hace Plinio en HISTORIA NATURAL, 7,
197 "Plumbum (album) ex Cassiteride insula primus adportavit
Midacritus" (Midácritus se lee para los investigadores como:
"Midas, Cibeles filius, Rex Phryxus" y se corresponde con
la cita de Higinio que afirma que este rey importaba estaño de las
Cassitérides -Galicia, costa Atlántica o Islas Británicas).
IGUALMENTE,
SCHULTEN EN SU LIBRO TARTESSOS (Austral 1972) en
su cita -1- de la página 83, rebate la posible teoría de que
Midashubiera podido ser el primero en importar hasta Grecia plomo
(estaño) desde Tartessos. Exponiendo que es errónea la
interpretación que así hacen y la afirmacíon en este sentido de:
Kirchner en PROSOP. ATTICA (s.V); Bechtel en GRIECHISCHE
PERSOSSENAMEN ( I, 1 ); Knaak en HERMES (1881, 587) y Salomón
Reinach en L´ANTHROPOLOGIE y en CULTES MYTHES ETS RELIGIONS
(III,29). Afuirmando el alemán que Midas no pudo ser el primero y
que aquella frase solo contiene el nombre de un marinero, que había
de llamarse Midocritus y no Midácritus. Corrigiendo hasta el taxto
de Plinio, pues consideraba que Midas no pudo haber tenido contacto
con Tartessos (seguramente por desconocerse entonces el significado y
la importancia de los neohititas y sobre todo, del reino de Midas).
Según
la cita de Higinio,
Fábula 274. Lo
que dicta
Schulen tambien para rebatir la idea de que Midas pudiera
comerciar con
Tartessos, exponiendo que a su parecer nada hay que tener de cierto
en estos que
nos afirman que
Midas comerciaba con plomo (estaño y "negro). Algo que unido a
la frase de
Plinio deja en
evidencia que el rey de Frigia importaba estaño y plomo de las
Cassitérides -islas
del Atlántico-,
via Tartessos (pese a la negativa que -sin argumentos- presenta
Schulten).
FINALMENTE
VIMOS COMO MIDAS ERA EL ÚLTIMO REY NEOHITITA, EXPULSADO O MATADO EN
GORDION. TODO ELLO, Y LA APARICIÓN DE ESTATUARIA Y DE RASGOS
IDIOMÁTICOS NEOHITITAS EN EL MUNDO DE TARTESSOS, NOS OBLIGA A PENSAR
QUE LOS SÚBDITOS DE MIDAS PUDIERON LLEGAR HASTA NUESTRAS TIERRAS EN
BUSCA DE METALES. HASTA DEBEMOS SUPONER QUE EL ENTERRAMIENTO DE POZO
MORO PUDIERA SER UNA TUMBA DE "FAMILIARES" DE MIDAS (REYES
NEOHITITAS EXPULSADOS DE ANATOLIA ENTORNO AL SIGLO VII A.C.).
.
LOS
ARTÍCULOS EN LOS QUE TRATÁBAMOS DEL ESTAÑO DE MIDAS, COMPRADO EN
EL REMOTO OCCIDENTE ERAN:
-
LO INVISIBLE EN LA MITOLOGÍA: Los bueyes de Gerión en el tesoro de
EL Carambolo (Parte X: Los descendientes del rey Midas y su posible
tumba en Chinchilla del Monte Aragón -el monumento neohitita de Pozo
Moro-). -RELACIONES ENTRE EL MUNDO NEOHITITA (FRIGIO) Y TARTESSOS-
VER:
http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2011/06/1-8-9-y.html
- LO INVISIBLE EN LA MITOLOGÍA: Los bueyes de Gerión en el tesoro de EL Carambolo (Parte X : Los descendientes del rey Midas y su posible tumba en Chinchilla del Monte Aragón. El monumento neohitita de Pozo Moro -Continuación-). VER: http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2011/06/1-8-8.html
- LO INVISIBLE EN LA MITOLOGÍA: Los bueyes de Gerión en el tesoro de EL Carambolo (Parte XI: Arganthonios y Midas. ¿Era de origen escita el monarca del oro?.). -DE NUEVO, LA RELACIÓN ENTRE EL MUNDO ANATOLIO DEL SIGLO VIII AL VI A.C. Y EL SUDOESTE PENINSULAR- VER: http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2011/06/1_28.html
- LO INVISIBLE EN LA MITOLOGÍA: Los bueyes de Gerión en el tesoro de El Carambolo (Parte XII: Midas. El rey de origen escita y los adoradores del oro que comerciaron con Tartessos.). - DESCUBRIMOS CITAS HISTÓRICAS QUE MENCIONAN EL COMERCIO ENTRE MIDAS (REY DEL ORO NEOHITITA QUE GOBERNABA GORDION) Y TARTESSOS- VER: http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2011/07/1.html
- LO INVISIBLE EN LA MITOLOGÍA: Los bueyes de Gerión en el tesoro de EL Carambolo (Parte X : Los descendientes del rey Midas y su posible tumba en Chinchilla del Monte Aragón. El monumento neohitita de Pozo Moro -Continuación-). VER: http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2011/06/1-8-8.html
- LO INVISIBLE EN LA MITOLOGÍA: Los bueyes de Gerión en el tesoro de EL Carambolo (Parte XI: Arganthonios y Midas. ¿Era de origen escita el monarca del oro?.). -DE NUEVO, LA RELACIÓN ENTRE EL MUNDO ANATOLIO DEL SIGLO VIII AL VI A.C. Y EL SUDOESTE PENINSULAR- VER: http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2011/06/1_28.html
- LO INVISIBLE EN LA MITOLOGÍA: Los bueyes de Gerión en el tesoro de El Carambolo (Parte XII: Midas. El rey de origen escita y los adoradores del oro que comerciaron con Tartessos.). - DESCUBRIMOS CITAS HISTÓRICAS QUE MENCIONAN EL COMERCIO ENTRE MIDAS (REY DEL ORO NEOHITITA QUE GOBERNABA GORDION) Y TARTESSOS- VER: http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2011/07/1.html
.
(3):
HISPANIA
(GEOGRAFÍA,
ETNOLOGÍA.,
HISTORIA)
por Adolf Schulten.
Traducción
y edición
de
Pedro
Bosch Gimpera y Miguel Artigas Ferrando
CON
UN APÉNDICE SOBRE
LA
ARQUEOLOGÍA PRERROMANA HISPÁNICA por
Pedro
Bosch Gimpera
REEDICIÓN
DE SEVILLA 2004
.
(4):
ADOLF
SCHULTEN: TARTESSOS (1921) Pag
56.
-CONTRIBUCIÓN
A LA HISTORIA MAS
ANTIGUA
DE OCCIDENTE -
ED.
RENACIMIENTO, reedición Sevilla 2004
Traducción
de Manuel García Morente - Prólogo de Michael Blech
.
(5):
Idem
cita anterior; Tartessos de Shulten 2004; pag 43.
En
este caso, las citas que contiene el texto a su vez, son las
siguientes:
(III)La
reproducción, en Bent, The
ruined cities 01 Mashona.Land (1902),219;
debo el dato a León Frobenius.
(IV)Reproducciones:
Fimmen, Kret.
myken. Kultur (1921),
122-123 // Forrer,Urgesch. des
Europáers, 361; Rev. Itn. d'archéol., núm. 9.
(V)Sobre
este punto me escribe Hub. Schmidt: "Barras de estaño en la
forma de las barras de cobre cretenses
atestiguarían, seguramente, relaciones entre Cornualles y Creta”.
.
(6):
Acerca
de los lingotes en forma de “hacha doble”, su relación con los
pectorales de El Carambolo y su significado, recomendamos leer:
-
LABRYS, BIPENNA, PELEKUS, BIFAZ, SAGARIS, LABRAUNDA O HACHA DOBLE:
(Capítulo 109 de: "Los bueyes de Gerión en el Tesoro de El
Carambolo"): Explica el significado de la Bipenna, comenzando
por el simbolismo del Júpiter Lápidus o Zeus Labrandeus. Asimismo
el del nacimiento de Atenea desde la cabeza de Zeus con un golpe de
hacha doble (como símbolo de iniciación masculino hacia el mundo
femenil). Tanto como el significado de la bipenna como signo de
inteligencia y de superación en el laberinto astral y terrenal
(indicando la capacidad de guiarse en el mar o en los desiertos).
PARA LLEGAR AL
ARTÍCULO; PULSAR:
http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2015/11/articulo-nuevo.html
-
ORÍGENES DEL SENTIDO APOTROPÁICO EN EL LABRYS Y EL LINGOTE PIEL DE
BUEY (Capítulo 110 de: "Los bueyes de Gerión en el Tesoro de
El Carambolo"): Explica el significado apotropáico de esas
dobles hachas, usadas desde la Edad del Bronce como "moneda"
de cambio y amuletos (además de ser armas y herramientas). Un signo
nacido desde la bipenna que llegó al posterior lingote del bronce ,
también inspirado en su diseño por el cuero (que igualmente servía
para comerciar, medir riquezas y para protegerse -ya que las
armaduras se hacían como corazas de piel y cobre-. Siendo el símbolo
de los pueblos metalúrgicos, sobre todo de quienes comerciaban el
bronce, cuya divulgación se debió a las bipennas de ese metal. Una
aleación de cobre y estaño que tuvo su origen en gran parte desde
las gentes del Atlántico. Ya que las minas cúpreas y las de
casiterita estaban principalmente en el litoral Oeste de la Península
Ibérica, en las costas de Bretaña y en las Islas Británicas.
PARA LLEGAR A ESTE, PULSAR:
http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2016/01/labrys-bipenna-pelekus-bifaz-sagaris.html
-
PROCEDENCIA, DESCUBRIMIENTO Y VALOR DE LOS TALENTOS OXHIDE -PIEL DE
BUEY- (Capítulo 111 de: "Los bueyes de Gerión en el Tesoro de
El Carambolo"). Vemos en este artículo como el origen del
bronce mediterráneo, durante la Edad Antigua, estuvo en el Atlántico
(donde las minas de cobre y estaño abundan). Debido a ello, hubo de
existir un comercio perfectamente organizado ya desde comienzos del
tercer milenio a.C. (inicio de la época dinástica egipcia); donde
se establecieron medios para llegar hasta nuestras costas y
abastecerse en ellas de metales preciosos (procedentes de Iberia y
las Islas Británicas). Algo que creó una industria que fundía esos
minerales en lingotes (piel de buey) con igual forma a los pectorales
del Tesoro de El Carambolo. Talentos cuyo peso y tasación estudiamos
en este artículo, analizando los pecios de Uluburun y Cabo
Calidonya. PARA LLEGAR AL ARTÍCULO PULSAR:
http://loinvisibleenelarte.blogspot.com.es/2016/05/articulo-nuevo-incluido-origenes-del.html
.
(7):
Hemos
dedicado artículos en nuestro blog "Megalitismo Atlántico",
a exponer los trabajos realizados en dicho yacimiento por parte del
Profesor Escacena y los posibles contactos entre las culturas del
Valle del Guadalquivir y el mundo Badariense. Por Carlos Manuel
Lorenzo
http://norteafricaeuropaneolitico.blogspot.com/2015/06/egipto-i-predinastico-4500-ac-http://norteafricaeuropaneolitico.blogspot.com/2015/06/egipto-i-predinastico-4500-ac-3000-ac.html3000-ac.html
.
(8):
VER
MI LIBRO
"HIGA,
HIGO, HÍGADO Y AOJO (magia, religión y medicina)
"El
cuerpo en la tradición",Valladolid
2007 (ed. fundación Joaquín Díaz).
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